"Mantenemos el medio rural y ahora parece que estorbamos"

I.P.
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ENTREVISTA | Agricultora, sindicalista, alcaldesa, madre y presidenta de la Cámara Agraria. Susana Pardo, mujer de 51 años y "de pueblo", como dice, es una pionera no solo con su dedicación al campo, sino por su presencia en los órganos de gestión

Susana Pardo Gutiérrez, nueva presidenta de la Cámara Agraria Provincial de Burgos. - Foto: Alberto Rodrigo

Susana Pardo es la mediana de seis hermanos. De padre agricultor y ganadero, desde pequeña se involucró en las tareas del campo. Fue a la escuela de su pueblo, Mazuelo de Muñó, estuvo interna en Sasamón y luego se desplazó a Burgos, donde estudió dos años Auxiliar Administrativo y después Informática de Gestión. Trabajó en el supermercado en Estépar, pero cuando se casó -también con un agricultor- y tras nacer y cuidar unos años de sus hijos, decidió quedarse con la explotación paterna y se dio de alta en el régimen general agrario. Lo demás ha venido rodado, poco a poco. Afiliada a la UCCL (Unión de Campesinos de Castilla y León), presidió la llamada Iniciativa Social de Mujeres Rurales. Fue la primera mujer en presidir un sindicato agrario y ahora es la primera al frente de una entidad cameral.

Nació el día de Santa Águeda, cuando las mujeres toman el mando, lo que parece una premonición. ¿Cree que está rompiendo barreras en el sector agrario?

Yo siempre he tenido la experiencia de que en mi pueblo las mujeres han trabajado toda la vida, unas pagaban la Seguridad Social y otras no, pero trabajar, trabajaban y gestionaban el papeleo. Creo que sí he abierto un camino y que , ahora, las mujeres en el campo tenemos visibilidad. Ahora soy yo pero se irá notando que cada vez más mujeres dan el paso para ocupar puestos de gestión.

Susana Pardo Gutiérrez, nueva presidenta de la Cámara Agraria Provincial de Burgos. Susana Pardo Gutiérrez, nueva presidenta de la Cámara Agraria Provincial de Burgos. - Foto: Alberto Rodrigo

Nosotras tenemos más la tendencia a cuidar de nuestros hijos, pero como en otros sectores, nos vamos posicionando arriba. Yo tengo una frase que me gusta repetir: hechos son amores y no buenas razones. Tenemos que demostrar que podemos estar para que otras se fijen y hagan lo mismo. La mujer tradicionalmente se ha sacrificado, si faltaba comida, era la primera que se lo quitaba para dársela a los hijos y al marido, o si había que ahorrar, decíamos no te preocupes, te compro ropa y yo me quedo con lo que tengo. Esa manera nuestra de ser quizás ha hecho que dejemos en manos de otros algo para lo que estamos igual de capacitadas, pero ya esa tendencia ha cambiado, como también han cambiado ellos, más involucradas en las tareas de casa y la educación de los hijos.

¿Cómo afronta este nuevo cargo?

Con ilusión, intentando ayudar en todo lo que pueda para que la Cámara Agraria siga funcionando como hasta ahora, dialogando con quien haga falta para llegar a consenso y que sigamos desarrollando nuestra función para no quedarnos en el camino como ha pasado con las cámaras en otras provincias de la región.

¿La designación ha sido un relevo natural al jubilarse De las Heras o una decisión del sindicato?, ¿le ha costado decir sí?

Todo se piensa cuando vas a coger algo nuevo y tener una responsabilidad, y sí, hay temor por el miedo al fracaso porque tienes que tomar decisiones. En mi caso, al ser mujer parece que estás más en el punto de mira, más expuesta a que te observen, a ver cómo actúas. Todo eso te produce un poco de miedo o respeto. Pero yo intento tener prudencia, no tomar las decisiones en caliente, pensarlas, hablar, asesorarme con la gente que tengo alrededor para intentar conseguir lo mejor para todos. A veces yo misma me cuestiono ¿valgo?, pero ganas de luchar, de hacer y emprender, no me faltan. Y en la Cámara, como en tantos otras actividades, lo que pasa es que hay problema de relevos, la gente no quiere involucrare, se pierde tiempo, dejas al lado a la familia... pero alguien tiene que tirar para adelante y la satisfacción de conseguir logros, también es importante.

Las cámaras de Burgos y Valladolid son las únicas que tienen actividad en la región, ¿por qué es importante que se mantengan?

Para gestionar todo lo relativo a pastos y rastrojeras en el sector ganadero y que los profesionales puedan conseguir las ayudas agroambientales, porque cada día son más los tramites burocráticos que hay que hacer. Todo ahora es telemático y esas gestiones se pueden hacer desde aquí porque muchos ganaderos ni tienen internet en sus pueblos.

Mantener la Cámara es mantener las juntas agropecuarias que radican en los pueblos y es donde dejan economía, haciendo obras, manteniendo su patrimonio, limpiando montes, desbrozando y arreglando caminos, y también gestionan los cotos firmando las tierras y poniéndolas al servicio cinegético, que deja dinero en los municipios. También la Cámara media en posibles conflictos.

Las mujeres tenemos que hacernos valer por nuestras capacidades y no por cumplir unos cupos"

Hace hincapié en eso, en que el sector ha sido y es el que mantiene el medio rural, ¿hay que recordarlo cuando es algo obvio?

Es que es así, aunque cada día hay menos ganaderos, por ejemplo. Mira, cada vez los que entran en los ayuntamientos de los pueblos son gente más urbana y no comprende nuestras inquietudes y necesidades. Somos atacados, más que ayudados. Agricultores y ganaderos hemos sido los que hemos mantenido el medio rural y ahora parece que estorbamos, para que vengan los que se fueron y nos quieran echar, y esto no puede ser y hay que defender el sector en todos los estamentos.

¿La Junta de Castilla y León ha desatendido a las cámaras?

Sí, la consejera Silvia Clemente apostó por otra cosa y se las cargó. Aquí funciona por el esfuerzo que hemos hecho, las ayudas de las propias juntas agropecuarias y de la Diputación. La Junta tenía que poner un secretario y un par de funcionarios. Solo nos proporciona la secretaria y a tiempo parcial, dos días a la semana. Nosotros mantenemos y pagamos tres trabajadoras, también a tiempo parcial, pero hubo que despedir a tres.

¿Se mantendrá el patrimonio, la sede?, porque se habló de un posible alquiler o de trasladarse al mismo las OPAS.

Ese local es de la Cámara Agraria y seguirá siéndolo. Si alguna vez hubiera que hacer algo, se hablará y consensuará y lo que se saque será de la Cámara. Pero de momento no hay intención de vender, es un patrimonio de todos los agricultores y ganaderos y así queremos que siga.

Estamos en un momento complicado por la entrada en vigor de la nueva PAC, la inflación, los altos costes, ¿cómo lo valora?

Todo momento de cambio es complicado. Creo que es muy fácil escribir en un papel y muy difícil que eso que se escribe se pueda llevar a cabo. Es triste que no se mire primero como funcionan las cosas sobre el terreno, hacer estudios y luego aplicar medidas o legislar. No puede ser todo para todos igual, no todos tendremos que sembrar leguminosas, porque habrá terrenos no aptos ni en todos los sitios la pluviometría es igual, y no puedes obligar a poner cubiertas vegetales en todas las zonas porque igual se secan los viñedos, los frutales... dicen que son ecorregímenes voluntarios, pero hay condicionalidades obligatorias. Al final hay una bajada de rentabilidad.

Es triste que en Europa nos exigen producir alimentos con menos herbicidas, pero cuando otros alimentos vienen de terceros países, habría que exigir que cumplan también. Hay que tener un principio de reciprocidad. Somos un sector intervenido y siempre hemos sido moneda de cambio con la que pacta Europa, y todo son exigencias y obligaciones, digitalización y burocracia... y es interesante pero hay profesionales que no pueden rentabilizar su explotación y llevar al día esa burocracia.

He vivido el campo desde niña y pese al difícil momento actual, animo a los jóvenes a que se incorporen"

¿Se ha olvidado lo que significa ser agricultor?

Parece que sí, por eso igual hay que ayudar al que produce alimentos, que somos nosotros, comemos todos los días, todos los días se necesita un agricultor, y cada vez somos más habitantes en el mundo. Hay que pagar por producir calidad no por dejar barbechos, que al final es lo que también la sociedad ve y con lo que se queda.

Si aquí no nos dejan producir, lo harán en otros países. España ya tiene que comprar trigo, cebada, maíz... si encima ahora vamos a producir menos, al final de qué comemos, de dónde lo traemos. La autosuficiencia alimentaria es muy importante y creo que estamos perdiendo el rumbo. La agroalimentación es la industria más potente a nivel mundial, tener un sector primario potente y bueno es lo más interesante que puede haber, y perder nuestra propia forma de alimentarnos creo que sería un fracaso a nivel de país y de Europa. Aunque igual es que creemos que podemos comer placas solares o molinos eólicos, que es de lo que nos quieren llenar al campo, y que está creando esa competencia a la hora de pagar las rentas de las fincas. La mayoría de agricultores somos renteros que no podemos competir con los precios que los lobbies pagan por un molino. Y no olvidemos que esos parques no crean trabajo en el medio rural, sino que echan a la gente de los pueblos, y yo me pregunto ¿así queremos luchar contra la despoblación? Creo que tenemos que proteger más los suelos agrícolas y buscar otros espacios para montar las energías renovables; mira, que llenen de placas solares todos los tejados de los pueblos, y así evitaremos que se caigan.

La Revuelta de la España Vaciada cumple 4 años ¿ve avances?

No; han cogido y han visto que hay un movimiento de mucha gente que está inquieta o que ve al medio rural como si no hubiéramos avanzado, como si vamos con el buey y la boina, pero hemos crecido y evolucionado. Es fácil llenarse la boca de promesas, pero a la hora de la verdad, hacen políticas contrarias. Hablan de repoblar, pero lo único que hacen es centralizar todo en las ciudades, y aquí poner pegas y quitar los servicios. Una ciudad no puede perder su medio rural y tiene que abrirse al mismo y todos colaborar, pero no se quiere mantener el medio rural y se quitan los servicios. ¡Qué fácil es gestionar desde la capital el medio rural sin conocerle! Les traería solo un mes a vivir aquí. Hay mucha palabrería pero no realidades que apuesten por el medio rural.

Y con este panorama que pinta ¿es buen momento para que se incorporen jóvenes y mujeres al sector y decidan vivir en los pueblos?

Aquí hay varias cuestiones. Si alguien tiene ya tierras y maquinaria porque es de familia agricultora es más fácil, hay que invertir menos, pero si tienes que empezar de cero es muy difícil porque ¿cuánto dinero necesitas?, muchísimo; pero aún así, creo que lo que más les inquieta ahora a los jóvenes y mujeres es la burocracia, les trae desesperados. Llega un momento que dices, a ver, que yo quiero cuidar ovejas, no dedicar más tiempo a rellenar papeles, y en la agricultura más de lo mismo. Es desesperante.

Vamos, que estamos ante agricultores-oficinistas...

Uno de aquellos mayores del medio rural decía: "Necesitaremos un pabellón para los papeles y una oficina para arar". Y creo no se equivocaba, aunque en vez de papel sea de manera digital y subido a una nube. Hay una generación de agricultores a quienes toda esta burocracia les pilla 'mayores' y se plantean dejar las explotaciones, pero no creas que solo a los más mayores, también a muchos jóvenes. Y además, el tema digital va a una velocidad que lo que hoy es nuevo, mañana ya es viejo y parece que hay que estar estudiando todos los días. Al final, es muchísimo trabajo burocrático y no sé hasta qué punto necesitamos regularlo todo tanto, tanto, tanto... La vida no es tan a rajatabla, y hay que avanzar y adaptarse claro, pero nos crea una sensación de estar vigilados, que en vez de agricultores somos delincuentes; vives con la sensación de que solo vienen a ver si tienes bien rellenados los papeles, a ver si te sancionan... y la rentabilidad de una explotación no está en un papel, es saber trabajar la tierra y saber cuidar al ganado.

Pondré todo mi empeño en que la Cámara siga activa y trabajando por los agricultores y ganaderos"

Pese a estas piedras en el camino ¿es optimista respecto al futuro?

La tendencia es cada vez más a que haya grandes explotaciones y menos gente. Me da miedo que acabemos siendo integradores de multinacionales que se han hecho reo de las semillas que hemos siempre hemos sembrado y que ahora parece que son de ellos. También creo que hay grandes lobbies que están atacando al sector ganadero; hay una 'carne cultivada' que necesita un mercado y para que este pueda abrirse hay que atacar al sector ganadero de carne. Hay intereses de grandes multinacionales que quieren quedarse con el poder de la agroalimentación porque como he dicho, es la primera industria a nivel mundial. Y que quede claro, los agricultores y ganaderos no tenemos la culpa del alza de los precios, porque nos les imponen, tanto de compra como de venta, de ahí la importancia de una buena ley de la cadena alimentaria y de proteger al agricultor y ganadero a título principal, al que vive de esto.

¿Anima a sus hijos a que se queden en el campo?

Yo lo llevo en la sangre y los animo, pero a innovar, a llevarlo de diferente manera, veo futuro en explotaciones de regadío y horticultura y venta directa. Pero en cereal es más difícil. A mí siempre me ha gustado emprender y ser mi propio jefe, y por eso sí los animaría. Pero hay que reconoce que estamos en un sector de riesgo y primero les he dicho que estudien y trabajen, y luego si quieren, que vengan. Pero antes, que vuelen, Y mira, la veo más en el campo a mi hija que al chico.