Desde que el pasado 29 de mayo (un día después de los comicios municipales), el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara la convocatoria de elecciones generales para el 23 de julio, el teléfono no ha dejado de sonar en las agencias de viaje. Y con la misma intensidad que recibían consultas de clientes con reservas ya hechas, se frenaban las nuevas, una situación esta última que también han notado los establecimientos hoteleros de Burgos capital, aunque sin asistir a una ola de cancelaciones.

Esta coyuntura es compartida por los representantes de ambas patronales. Gema Alonso, vicepresidenta de la asociación ABEAV que aglutina a las agencias independientes, reconoce que, en líneas generales, existe un «enfado» por parte la clientela, además de detallar otras serie de circunstancias acarreadas por dichos comicios. En este sentido, hace referencia a ciudadanos que directamente han decidido cambiar sus vacaciones o modificado las fechas del viaje, si bien precisa que la mayoría mantiene las que había elegido en un principio confiando en que la suerte se ponga de su lado y no tenga que acudir a una mesa electoral.

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