Adif ya sabe cómo acabar con las goteras de la estación

L.M. / Burgos
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El titular de la terminal ferroviaria cambiará las gomas de estanqueidad de los exutorios para terminar con las filtraciones de agua cuando hay tormenta

Imagen de las goteras a principios del pasado mes de junio. - Foto: Christian Castrillo

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ya sabe cómo meterle mano a las goteras que se siguen produciendo en el interior de la estación de tren Burgos Rosa Manzano. A pesar de que el Adif realizó una serie de obras entre abril y junio del año pasado para mejorar la cubierta, la actuación no incluyó los exutorios.

Estos elementos permiten la evacuación de humos en caso de incendio o el control de la temperatura, y es precisamente este canal el que permitía las filtraciones. Tras el análisis de las diferentes alternativas que puso el Adif sobre la mesa, la solución adoptada es el cambio de gomas de estanqueidad de los exutorios.

Es más, precisan desde el organismo público que desde el último episodio de tormenta con vientos racheados, ocurrido a mediados del pasado mes de mayo, no han vuelto a aparecer las goteras en la terminal burgalesa. «Los informes técnicos realizados apuntaban a que las filtraciones se han localizado en situaciones de lluvia tormentosa y mucho viento, en las que las precipitaciones se filtran por determinadas partes de los exutorios de la estación», destacan.

El tormentoso inicio del pasado mes de junio -meteorológicamente hablando- provocó que al menos dos cubos y varios carteles volvieran a hacer acto de presencia en el hall principal de Rosa Manzano. Además de en vestíbulo, el problema se reprodujo también en los dos accesos a los parking. Estas vías de entrada y salida, ubicadas a ambos extremos del edificio, cuentan con una cubierta de cristal por donde también se filtró el agua. Aunque la opción es la de renovar las gomas de los exutorios, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias barajó también la posibilidad de instalar cubiertas sobre estas salidas para protegerlas del impacto directo de la lluvia y el viento.

Ajena a la reforma. El Adif, previa tramitación de un año y medio, adjudicó a una firma navarra la reparación de la cubierta de la terminal por 72.746 euros. La compañía, tras meses dilatando el inicio de la actuación, se apresuró durante las semanas previas a la inauguración de la alta velocidad a montar un gran andamio en el interior del edificio para evitar unos problemas que se venían arrastrando desde hacía años.

Estos trabajos parece que sí que resultaron óptimos, ya que las filtraciones de agua actuales, tal y como apunta el Adif, no proceden de este espacio.

Esta cuestión, la de las goteras, llegó incluso a ser tratada en el seno del Congreso. El parlamentario de Cs Juan Ignacio López-Bas llegó a interpelar al Ejecutivo al toparse en una visita a Burgos con media docena de cubos.