Las ayudas económicas que ofrece el Ayuntamiento de Poza de la Sal para mejorar el estado de las viviendas, tanto del centro histórico como del resto del casco urbano, han dado sus frutos y en tan solo tres años se han repartido 217.954 euros para tal fin. Un porcentaje alto de los propietarios quizás no hubiera dado el paso si no hubiera recibido una subvención, pero el hecho de que el municipio cubra hasta el 60% del presupuesto total de la obra anima a que en los últimos doce años casi doscientos inmuebles luzcan una cara renovada.

La cuantía a recibir por la rehabilitación estructural o estética de una casa varía dependiendo de su ubicación, y los solicitantes podrán beneficiarse de entre 1.000 y 10.000 euros, en el caso de que necesiten la redacción de un proyecto técnico para su ejecución como actuaciones totales en cubiertas, soportales o estructuras del edificio; hasta 8.000 para aquellas actuaciones que requieran una memoria valorada para desarrollar reformas puntuales; y hasta 6.000 para mejoras de menor entidad, como estanqueidad frente a la lluvia y la humedad, obras parciales en tejados o en fachadas o trabajos en la carpintería exterior. En el caso de que estas mismas actuaciones se realicen fuera del centro histórico, el porcentaje disminuirá. 

«Excepcionalmente y con la finalidad de garantizar la seguridad frente a accidentes», explica el que será alcalde de la localidad hasta el 17 de junio, José Tomás López, «existe una línea de contribución especial para ayudar en la intervención de aquellos edificios que presenten un estado tan lamentable que resulta inviable su rehabilitación y sea declarado como ruina. En estos casos, el propietario tiene la obligación de intervenir y desde el Consistorio le ayudaremos», añade. Para las actuaciones tales como el vaciado de edificios para su posterior construcción o el derribo y vaciado de aquellos que presenten especial problemática de conservación, habiéndose declarado ruina inminente, se «otorgarán ayudas de hasta un 40% del gasto con un máximo de 6.000 euros, pero la cuantía podrá aumentarse hasta un 50% si el plazo desde la concesión de la licencia y el inicio continuado de los trabajos es inferior a dos meses», aclara López.

El Ayuntamiento ha destinado una partida presupuestaria de 80.000 euros para dichas labores «que podrá incrementarse en el caso de que sea necesario», añade. En el año 2020, «repartimos 40.808 euros y se acondicionaron ocho viviendas. Hay que tener en cuenta que fue el año de la pandemia y que cantidad de propietarios no viajaron a Poza durante meses», expone el regidor. Sin embargo, en las dos anualidades posteriores (2021 y 2022), las peticiones se dispararon. En este periodo «repartimos 155.536 euros que fueron a parar a quince inmuebles». La tendencia continúa en alza y en los cinco primeros meses de 2023, tres titulares han solicitado la ayuda. Si bien, el alcalde recuerda que «estas subvenciones no se aplicarán en aquellas obras que se financien en más de un 80% con fondos procedentes de otras administraciones públicas». 

La buena acogida de las ayudas ha impulsado el interés por, además de mejorar el estado de las casas, el de las propias calles de la villa, que han ganado espacios muy reclamados por los turistas para emplearlos como fondos de sus fotografías. Durante el 2022, la localidad logró engordar un 10% el número de viajeros hasta llegar a los 16.500 foráneos atraídos, principalmente, por las visitas guiadas en el casco histórico y las tradicionales salinas.