La exigencia agraria para el Consejo Agrario: medidas y dinero

SPC
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Las organizaciones profesionales reclaman al Gobierno que declare a Castilla y León como «región con afección alta de sequía» para recibir el máximo de ayudas

La sequía afecta a gran parte de la producción cerealista de la Comunidad, en especial a las zonas del sur. - Foto: Rubén Sserrallé

El coordinador regional de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, exigió ayer a la Junta que «ponga medidas y dinero encima de la mesa» durante la reunión que hoy celebrará el Consejo Agrario e incidió en que la Administración autonómica debe complementar la partida aprobada por el Gobierno que es «totalmente insuficiente» tras «discriminar» a la Comunidad «de forma injusta» al situarla como de afectación media de la sequía, cuando su situación es «extrema».

Precisamente por ello, la Alianza UPA-COAG reclamó al Gobierno de España, a través de la Delegación en Castilla y León, que la Comunidad pase a ser considerada «región con afección alta de sequía» para que los agricultores y ganaderos castellanos y leoneses puedan acceder al máximo de ayudas recogidas en el real decreto-ley publicado. Según recordó la Alianza en un comunicado remitido a Ical, «la realidad a día de hoy es que los daños que se han producido en nuestra región son elevadísimos» y en varias provincias, en especial las del sur, han sufrido «iguales o más pérdidas» que, por ejemplo, en Castilla-La Mancha o Extremadura.

González Palacín también recordó que otras autonomías ya han puesto dinero para el campo en sus territorios y esperó que la Junta siga hoy ese camino y complete los fondos estatales para paliar una situación de sequía que es la peor de los últimos años. «Ni en el 92 fue tan dura», dijo, para constatar que el campo «vive con la gravedad añadida de que los costes de producción han aumentado al doble».

El dirigente agrario concretó que «poner en marcha» un hectárea de cereal cuesta alrededor de 1.000 euros, lo que supone que «los primeros 3.000 kilos van a cubrir costes» y la media en amplias zonas del sur de la Comunidad, «no llega a 800 kilos». Así las cosas, aseveró que este año se perderá dinero «incluso con el seguro» por lo que apeló a «dar una vuelta» a las pólizas; pero sobre todo, insistió, es preciso poner ayudas directas y liquidez para que los profesionales del sector puedan afrontar la campaña.

También la Alianza UPA-COAG volvió a reiterar la necesidad de que la Junta «deje de esconderse y, por fin, haga públicas las medidas que debe adoptar para compensar las elevadísimas pérdidas que provocará la sequía», y que, entre otras, deberían ser «al menos las mismas cuantías como las aprobadas por la Administración central».

Por su parte, el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, subrayó en Valladolid que el Ejecutivo autonómico hará todo el esfuerzo «posible» para proteger al sector primario en una situación «tan excepcional», a raíz de la sequía que afecta al campo, y anunció que el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, está en conversaciones con las organizaciones profesionales agrarias (opas) para abordar las posibles ayudas y fondos extraordinarios para paliar la sequía. 

El vicepresidente valoró el compromiso del Gobierno autonómico con el campo al citar las inversiones para la modernización de los regadíos, el impulso de las concentraciones parcelarias y el incremento del 15 por ciento del presupuesto para la mejora de las explotaciones agrícolas y ganaderas.