Libros de ida y vuelta cargados de valores

B.A. / Burgos
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Esmeralda Bermejo crea en Covarrubias el proyecto Voltereta. Desde una web presta títulos infantiles y juveniles con opción de compra y con parte de lo recaudado destinado a oenegés

Esmeralda Bermejo se mudó hace cuatro años de Valladolid a la villa rachela, donde ha gestado el proyecto. - Foto: f2estudio

Voltereta por dar mucho la vuelta a las cosas. Voltereta por los giros que da la vida, de saltar de la ciudad al pueblo. Voltereta por regresar al papel y que los niños olviden el digital. Voltereta por retornar valores sostenibles, de comercio justo y de economía circular. Voltereta porque las lecturas son de ida y vuelta. Todo lo anterior es lo que está detrás del proyecto que Esmeralda Bermejo acaba de lanzar y que con mimo ha ido gestando en Covarrubias durante los últimos tres años. ¿El nombre? Voltereta, una web a través de la cual la emprendedora presta libros infantiles y juveniles, que está asentada sobre valores de compromiso social y que tiene como objetivo que los títulos lleguen a todos los pequeños, «vivan donde vivan y dejando una huella positiva por el camino». 

Esmeralda Bermejo llegó a la villa rachela con su marido y su hija en el 2019 buscando una existencia más tranquila y dejando atrás Valladolid. Durante sus primeros meses en la localidad, que coincidieron también con la irrupción de la pandemia, sólo echaba una cosa de menos de la ciudad, la posibilidad de tomar prestados libros variados y actuales de la biblioteca teniendo en cuenta que la pequeña los devoraba -y devora-. Y pensando en que «estaría fenomenal» que todos esos ejemplares infantiles se pudieran recibir en casa surgió su proyecto.  

«La idea inicial era acercar la literatura a los niños del medio rural, pero también a familias de la ciudad con falta de tiempo para acudir a una biblioteca», comenta Esmeralda, que bajo una suscripción mensual envía al domicilio 6 títulos elegidos por el lector o sugeridos por ella en función de los gustos de quien los vaya a leer. «Los tienen el tiempo que quieran, cuando los devuelven pueden escoger 6 más y también tienen la opción de adquirir aquellos que más le hayan gustado», comenta. 

Solidarios. Pero Voltereta es más que acercar a los niños títulos para que lean o les lean. También es mostrar a los pequeños un sentido crítico, que no vale comprar cualquier cosa, que hay que dar valor a lo que uno tiene y que hay que cuidarlo porque después puede ser utilizado por otra persona. «Voltereta nace para dar una vuelta a nuestra manera de leer y también a nuestra manera de consumir.

Enseñando a nuestras niñas y niños valores como la sostenibilidad, el consumo responsable y el compromiso social y ambiental y así conseguir entre todos dejar un impacto positivo en la sociedad y el planeta», comenta Esmeralda, que por todo ello dona parte de lo recaudado por cada suscripción a Idea Libre, Save de Children y Plant-for-the-Planet. «Hay que transmitirles que lo que han pagado por poder disponer de esos libros en casa también sirve para que unos niños puedan desayunar o plantar árboles», comenta.

Los libros que forman parte del catálogo, que poco a poco irá aumentando y actualizando, son seleccionados con mucho cuidado. «Siempre son lecturas de calidad y busco que además de diversión aporten otros valores, que tengan un trasfondo, que empodere a quien los lea», afirma Esmeralda, que cree en el impacto positivo de la lectura para cambiar el mundo y que considera que para convertir a los niños en buenos lectores hay que ofrecerles libros. «Sus gustos van cambiando y dependen mucho de la etapa por la que estén atravesando. Gracias a Voltereta pueden tener acceso a muchos, pero sólo quedarse con aquellos que le aporten algo e ir conformando su propia biblioteca con títulos que realmente le gustan. Muchas veces compramos y acumulamos sin que les gusten o llenen», añade esta emprendedora cultural.