El Ayuntamiento de Burgos seguirá manteniendo abierta la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) sin ayuda de la Junta por el "gran servicio" que presta a los ciudadanos. El alcalde, Daniel de la Rosa, y la concejala de Consumo, Dolores Ovejero, no ahorran en críticas al gobierno regional por la falta de apoyo a pesar de que las competencias en esta materia son de la Junta.
"Después de casi dos años remitiendo escritos a la Dirección General de Comercio y Consumo de la Junta demandando esta ayuda, la única contestación que hemos recibido es que en el año 2022 no habrá línea de subvenciones y se nos informará cuando se aprueben los presupuestos de 2022", señaló el alcalde.
Ambos responsables municipales lamentaron que las OMIC de Valladolid y Palencia hayan tenido que cerrar por falta de dinero. "Nosotros mantenemos nuestro compromiso con Burgos y seguiremos apoyando esta oficina".
El Ayuntamiento de Burgos sufraga el salario de cuatro trabajadores y también la externalización de algunos servicios con la empresa Gabiteco con un coste anual de 250.000 euros.