El niño Jorge Hernández Miguel, elegido Obispillo 2022

M.L.M. (Ical)
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El pequeño de la Escolanía Pueri Cantores de la Catedral de Burgos recorrerá las calles de la ciudad el día 28 vestido de obispo y a lomos de una mula blanca

El niño Jorge Hernández Miguel, elegido Obispillo 2022 - Foto: Ricardo Ordóñez (Ical)

El niño Jorge Hernández Miguel fue elegido hoy 'Obispillo 2022'. El pequeño de la Escolanía Pueri Cantores de la Catedral de Burgos recorrerá las calles de la ciudad el próximo 28 de diciembre, día de los Santos Inocentes, vestido de obispo y a lomos de una mula blanca. Le acompañarán como vicario y secretario, Mateo Cerdá Esteban y Rubén García Barbero, respectivamente.

El escolano elegido este año es un niño de diez años que estudia quinto de Educación Primaria en el colegio 'San Pedro y San Felices', según informó el director de la Escolanía 'Pueri Cantores' de la Catedral de Burgos, Amador Pérez Arnáiz, tras el acto de proclamación se produjo en la Sala Polisón del Teatro Principal, como viene siendo habitual.

Así, definió al pequeño como "un niño muy tranquilo, obediente y muy bueno" al que "le gusta compartir y ser amable con los demás" pero, sobre todo, resaltó, "le gusta cantar, leer, jugar y adora los animales". El nuevo Obispillo 2022 tiene un hermano mayor, Eduardo Hernández, "que lo quiere mucho", resaltó Pérez Arnáiz.

El acto de investidura tendrá lugar el día 28 de diciembre a las 11,30 horas en el Monasterio de las Madres Salesas. Posteriormente, habrá el tradicional saludo al arzobispo Mario Iceta a las 12.30 horas, para a continuación proceder al paseo en caballo por el Espolón y visita al Ayuntamiento y al alcalde, Daniel de la Rosa. 

El 'Obispillo' es un cargo que supone poder ser el representante de todos los niños de la ciudad el próximo día 28. Se trata de una conocida figura, tradicional en los festejos navideños de la capital burgalesa desde hace décadas, y cuyos orígenes se remontan al siglo XV, cuando el Cabildo Metropolitano de la catedral permitió este día que un niño se vistiera de obispo. 

Así, cada año se viste a uno de los niños de la Escolanía de los Pueri Cantores que haya recibido la Primera Comunión ese mismo año, y durante un día dispone del mando de la ciudad para pedir favores para los más pequeños. Sin embargo, esta tradición se vio truncada durante un largo periodo de tiempo con la desaparición de la Escolanía de la Catedral y no se retomó hasta el año 1996 gracias al esfuerzo del Cabildo.