«Superado el subidón inicial, hay que dar argumentos sólidos»

Á.O.
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Álex Albístegui ganó en sus dos primeros partidos como técnico del Burgos CFPromesas pero perdió de manera contundente en el último ] Está «preparado para pelear en la zona baja» y se muestra «optimista»

Álex Albístegui da indicaciones a los jugadores del Burgos CF Promesas durante el duelo ante el Bergantiños. - Foto: Christian Castrillo

Álex Albístegui tiene un gran reto por delante. Después de sumar dos victorias en su estreno como técnico del Burgos CF Promesas, el Bergantiños pasó por encima de los suyos en Castañares para rebajar la euforia. «Somos conscientes de que ese subidón del principio desaparece y ahora tenemos que mostrar las mejoras. Perdida la ilusión del cambio inicial de entrenador, hay que dar argumentos más sólidos. Hay que dar pasos cada semana», señala el exjugador vasco, que se muestra «preparado para un año en el que seguramente estemos en la zona baja», aunque «si somos capaces de estar cerca de nuestra mejor versión podemos competir en esta categoría», confía.

«Sí que veo mimbres y soy optimista por naturaleza», añade Albístegui, que recuerda que las victorias ante el Coruxo y el Polvorín llegaron «sin hacer partidos redondos», por lo que confía en que todavía hay «mucho margen de mejora» dentro de la plantilla. «La suerte que tuvimos es que los rivales no nos castigó en los momentos malos, pero el pasado fin de semana el Bergantiños, de mucho nivel, nos castigó los errores de bulto que tuvimos como equipo. No nos dio ni para competir», recuerda.

Y antes de que vuelva la competición el fin de semana del 19 y 20 de noviembre, el técnico tiene la oportunidad de seguir fortaleciendo el grupo. «Hemos sacado seis puntos en tres partidos, lo hubiéramos firmado todos. Ahora tengo tiempo de conocer del todo al grupo. Muchas veces se dice que cuando pierdes lo que quieres es volver a jugar, pero a nosotros nos vienen bien estas dos semanas sin competir. Para entrenar en el aspecto físico, porque queremos tener más ritmo, y para el táctico, para que calen los conceptos nuevos. Estoy encantado de tener más tiempo para nosotros mismos», reconoce sobre el parón.

Y es que, a pesar de que no considera que su irrupción rompa con la línea que siguió Carlos Aguilera con el filial burgalesista, es consciente de que un cambio en el banquillo siempre necesita un periodo de adaptación. «Todos los entrenadores, aunque los estilos se parezcan, tenemos nuestras propias ideas y necesitamos un tiempo». 

Eso sí, no considera que su adaptación al proyecto haya sido complicada. «Cuando llegué me encontré con un vestuario que no estaba en su mejor momento a nivel mental. El equipo tenía dos puntos y cambiar de entrenador siempre hace que las energías se reactiven. Para mí no fue complicado por el mero hecho de cambiar. Sabemos que no va a ser un año fácil en una categoría en la que además hay cinco descensos», remarca el exjugador blanquinegro, que a pesar de la situación está «esperanzado en que, poco a poco, se verá la mejor versión del equipo» para ganar posiciones y tranquilidad en la tabla.

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