En su empeño por dar una salida a la surrealista situación que se vive con el solar del número 17 de la plaza de Santa María, donde permanece en pie desafiando las leyes de la gravedad un muro que Patrimonio se niega a que se desmonte al estar blasonado, el Ayuntamiento parece dispuesto a embarcarse en la compra de parte de la parcela para, ya como titular de una porción de los terrenos, poder presionar para que se ejecute algún proyecto que suponga su adecentamiento de cara a la celebración, en 2014 de la muestra de Las Edades del Hombre en la iglesia de Santa María, situada justo frente a la parcela.
En concreto, el equipo de gobierno ha apalabrado ya la adquisición, por un montante aproximado de 260.000 euros, de la parte de tres de los cinco propietarios del solar. Con esta operación, el Consistorio se convertiría en titular de 72 de los 172 metros cuadrados de superficie con que cuenta el terreno. Una operación que se da ya prácticamente por segura y, de hecho, en la propuesta del reparto de remanentes se contempla una partida de 220.000 euros para hacer frente a los pagos.
El problema radica en que la aportación de estos tres propietarios supone algo menos del 42% del total de la parcela, con lo que la opinión del Ayuntamiento no sería determinante a la hora de decidir si se lleva a cabo alguna actuación urbanística que permita acondicionar este entorno. De hecho, ni siquiera lograría una participación definitiva si consiguiera comprar su parte al cuarto propietario minoritario ya que es el quinto el que, al parecer, es el dueño de más de la mitad del solar.
Se da la circunstancia, además, de que aunque se habla de este terreno como una sola unidad, en realidad son dos parcelas. El acuerdo se ha alcanzado con parte de los dueños de la que hace esquina, mientras que la segunda, existente entre la bodega de la peña El niño de la Capea y el edificio construido en la calle de Las Ánimas es propiedad de un conocido empresario con el que, precisamente, y aprovechando un viaje a Burgos capital, se reunió el miércoles por la mañana la alcaldesa para intentar llegar también a un acuerdo de compra.
En cualquier caso, y a pesar de que no se consiga incrementar el porcentaje de propiedad, el Ayuntamiento confía en que su incorporación a la lista de titulares permita presionar para que se ejecute algún proyecto. «Con esto podemos liderar el proyecto y así, el resto de los propietarios, si quieren, pueden empezar a construir», reconoció Celia Bombín, concejala de Cultura, departamento que coordina las negociaciones.
Curiosamente, la edil explicó que el Ayuntamiento, pese a ser propietario, no pretende entrar en la construcción del inmueble que se desarrolle en dicha parcela, sino que únicamente respaldará el proyecto que presente el resto de dueños y, posteriormente, tomará posesión de la parte proporcional del inmueble para crear en él un centro de recepción de visitantes.