14 pueblos de más de 500 habitantes aspiran a un cajero fijo

F. TRESPADERNE
-

La Diputación de Burgos da pasos para poner freno a la exclusión financiera que sufren muchos municipios burgaleses

Quintanadueñas es una de estas localidades de más de 500 habitantes que no cuenta con cajero automático. - Foto: Alberto Rodrigo

La exclusión financiera es un problema que se viene acentuando en el medio rural desde hace años y al que hasta ahora nadie parecía interesado en poner freno, aunque algunos pasos como el de la Diputación de Burgos se están dando para mitigar la situación, en especial en aquellas localidades en las que, por número de vecinos, se considera viable instalar un cajero móvil o fijo que preste ese servicio.

Tanto las entidades financieras, como las administraciones, diputaciones y municipios, manejan el informe realizado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie), en el que se hace un diagnóstico de la situación del país, por comunidades y provincias. 

El listón para la inclusión financiera de municipios, lo sitúan en 500 habitantes, estadio en la que se encuentran 14 municipios burgaleses que no tienen oficina bancaria, ni cajero ni agente financiero. Se trata del Valle de las Navas (530 vecinos), Revillarruz (564), Cogollos (592), Buniel (605), Villariezo (690), Fresnillo de las Dueñas (695), Villalba de Duero (707), Merindad de Montija (730), Modúbar de la Emparedada (768), Castrillo del Val (814), Quintanilla Vivar (872), Cardeñajimeno (1.175), Villalbilla de Burgos (1.454), y Alfoz de Quintanadueñas (2.163).

Estos son los prioritarios para actuar por el número de vecinos, de hecho una entidad financiera, CaixaBank, la misma a la que se ha adjudicado el contrato de la Diputación para poner en marcha un cajero móvil que vaya dos veces al mes a 46 municipios, ya se ha dirigido a la institución provincial para sondear la posibilidad de poder actuar en un futuro en esos 14 pueblos e instalar un cajero automático en alguna dependencia municipal que cuente como mínimo con un punto de luz. Un plan que todavía está 'verde' señalan, pero que confían en que se pueda materializar en un futuro próximo. 

La situación en la provincia, según el informe Ivie, es cuando menos preocupante, ya que de los 371 municipios 313 no tienen oficina bancaria, lo que deja sin este servicio a las 50.272 personas que residen en ellos. De esos 313 sin oficina ni cajero, 309 tampoco tienen agente financiero ni oficina de Correos, mientras que 284 (en los que viven 42.195 personas) carecen cualquier servicio financiero.

Al margen de la iniciativa de la Diputación para dotar a la provincia de un cajero móvil con el que llegar a 46 localidades de menos de 500 habitantes, la institución provincial también está desempeñando el papel de intermediario con CaixaBank y esos 14 municipios que figuran en el lista del Ivie, documento que se ha puesto a disposición del Gobierno y de las entidades financieras para que pueden tomar medidas e intervenir con el fin de revertir la situación de exclusión financiera.