Las posiciones que sostienen por un lado los sindicatos y por otro la patronal con respecto al futuro convenio del sector del metal no podrían estar más alejadas. El viernes ambas partes volvieron a sentarse a la mesa tras el primer encuentro, donde UGT y CCOO entregaron a Femebur su plataforma de reivindicaciones.

En esta ocasión les tocó el turno a los empresarios, que plantean un convenio a tres años que tiene como prioridad la desaparición de la cláusula de revisión salarial a IPC. Este mecanismo permite ajustar las nóminas a las variaciones del índice de precios al consumo de cada curso.

Aunque desde la propia Femebur confiesan que esta herramienta es una de las prioridades de los sindicatos, apuntan que el sector requiere «una moderación salarial muy exigente y férrea» que acerque el convenio de Burgos a la media nacional. «Hemos cumplido la revisión pactada en la última negociación, pero ha supuesto todo un desafío para las empresas por los altos costes que soportan», reconoció Esteban Pérez, vicepresidente de la patronal.

Aunque no achaca de forma explícita a los salarios del metal una posible disminución de la actividad o de las firmas activas en el sector, reconoció que «sí que es un factor que tiene mucho que ver». De este modo, sugieren que este ejercicio se congelen las nóminas, mientras que de cara a 2024 y 2025 se pacten incrementos del 1% y del 1,5% respectivamente. Otro de los planteamientos que puso sobre la mesa Femebur fue el de aumentar en 8 horas la jornada anual de los empleados.

También abogan por congelar la antigüedad, reducir al 60% el salario de los contratados en prácticas, crear la figura del contrato de fijo discontinuo a tiempo parcial o suprimir las coberturas en el seguro colectivo que no vengan derivadas de un accidente laboral o enfermedad profesional. «No hay que ser cortoplacistas con este sector. Los salarios están completamente fuera de mercado», sentenció Pérez.

Parte social. Tanto en UGT como enCCOO consideraron una «declaración de guerra» el planteamiento que conocieron por parte de Femebur. «No muestran ninguna intención de querer llegar a un acuerdo», lamentó Juan Ignacio Ruiz, secretario provincial de Industria en CCOO, que denunció que la intención de la patronal es «cobrarse lo que nos han pagado estos años».

Su homólogo en UGT FICA, Ramiro Marijuán, admitió que los sindicatos «estamos dispuestos a flexibilizar alguna de las condiciones» aunque convidó a la patronal a que sea ella quien se lo transmita. «Entendemos que presenten una plataforma de máximos, pero estamos aún muy lejos», sentenció.