Una inflación desbocada. Un conflicto a las puertas de Europa que amenaza con desencadenar una guerra nuclear nunca antes vista. Uno de los años con las temperaturas más cálidas desde que hay registros. Empresas quebrando por la falta de pedidos o por el encarecimiento de las materias primas. Una crisis de suministro de energía que pone en jaque a las familias a las puertas del invierno. Autónomos cerrando sus negocios ante el parón de consumo. Los embalses y pantanos sin apenas agua tras meses sin lluvia.

El panorama de noticias espeluznantes que han colmado los periódicos e informativos a lo largo de este 2022 es, cuanto menos, aterrador. Vistas en perspectiva, las esperanzas y anhelos de las nuevas generaciones no tienen visos de ser muy positivas que digamos. Bajo este pretexto de 'colapsidumbre', y con una reflexión inducida por la joven actriz Luna Fulgencio, Campofrío lanza este miércoles su tradicional y esperado anuncio de Navidad, el undécimo, 'La Herencia'.

«Un momento... Sois conscientes del marrón que nos dejáis? Mira, ¿sabéis qué herencia nos hará ricos de verdad? Esa que teníais cuando nos trajisteis a este mundo», replica en varias ocasiones la intérprete durante el spot. El comercial es ya un clásico asentado en el calendario festivo de finales de año, un resumen completo, que invita a reflexionar sobre lo sucedido. Al mismo tiempo, muestra un punto irónico y cómico sobre el curso que ahora toca a su fin. El rodaje del mismo se ha convertido en todo un acontecimiento que durante tres días y medio congregó en Madrid a un equipo de 90 profesionales y cerca de medio centenar de extras. Todos ellos bajo las órdenes de Daniel Sánchez-Arévalo, que suma con el de 2022 su cuarta colaboración con Campofrío. El madrileño ha trabajado junto al director de fotografía Álex Catalán y el director artístico Pepe Domínguez, ambos con un Premio Goya por su labor en 'La Isla Mínima'.

Antonio de la Torre, durante la grabación de una de las escenas cumbre del anuncio de Campofrío, cuando pronuncia la palabra ‘coraje’ junto a la barra del restaurante Martinete. - Foto: Patricia

«En un mundo cada vez más desolador a todos los niveles, queremos hacer una reflexión sobre el legado que queremos dejar. La idea de las directoras creativas del proyecto, Mónica Moro y Raquel Martínez (Agencia This is Libre), me parece fantástica», reconoció Sánchez Arévalo a este periódico durante el último día de grabación a mediados de noviembre. El anuncio que hoy se lanza, y que a buen seguro correrá como la pólvora por redes sociales y teléfonos móviles, tuvo en el Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja y en el céntrico restaurante Martinete de Madrid sus dos emplazamientos. En este último se desarrolló la parte final del rodaje, plagada de rostros muy conocidos por el público general.

En pleno barrio de Salamanca, bajo una tormenta que sorprendió por su virulencia hasta al mismísimo hombre del tiempo de Antena 3, Roberto Brasero, se grabaron las últimas escenas (...).

(Reportaje completo, en la edición impresa de Diario de Burgos de hoy miércoles o aquí)