El 70% de los alumnos que inicia hoy el curso lo hace en colegios públicos

R.L. / Miranda
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Las clases de Infantil y Primaria se retoman con 3.285 escolares. Los nueve colegios, de los cuales solo dos son concertados, se adaptan a la reforma educativa

En el primer curso de Infantil se han cubierto la mayoría de las plazas. - Foto: R.L.

Las aulas de los nueve colegios mirandeses vuelven a abrirse para recibir a los 3.285 alumnos que estudiarán en este nuevo curso. Hoy es el primer día de clase en Educación Infantil y Primaria, una jornada de reencuentros en la que posiblemente se noten algunas ausencias ya que estamos en la víspera del inicio de las fiestas patronales y es probable que algunos padres estiren sus vacaciones hasta el próximo lunes.

Del total de alumnos, el 70% lo harán en los siete centros públicos, mientras que los dos únicos colegios concertados que  quedan en la actualidad, Sagrados Corazones y Sagrada Familia, tendrán 506 y 406 escolares respectivamente. Lo que no varía independientemente del modelo de gestión es que el nuevo curso estará marcado por la reforma educativa aprobada por el Gobierno, la Lomce, en la que los alumnos y los profesores deberán acostumbrase a un cambio de asignaturas. En este curso, la reforma solo afectará a primero, tercero y quinto de Primaria, una normativa que otorga más énfasis a Matemáticas, Lengua e Inglés; desaparece Educación para la Ciudadanía y se elimina Conocimiento del Medio, que pasa a dividirse en Ciencias Sociales y Ciencias Naturales. Los profesores han trabajado estos últimos meses para preparar las asignaturas y adecuar sus materiales. «El curriculum es diferente y la carga horaria y los documentos de evaluación también cambian para los que cursan con la Lomce. Es una situación provisional, porque al año que viene ya todos los alumnos serán de Lomce, pero hay adaptarse», explican desde uno de los colegios.

En total, 226 maestros empiezan las clases en Infantil y Primaria. La mayor parte de las plantillas no han sufrido variaciones, si bien en algunos centros sí ha habido algunos cambios. En Cervantes (250 alumnos en total) se incorpora un profesor para atender una nueva clase de segundo de Infantil, y en La Charca (250 alumnos) suman un maestro más  para Primaria por el desdoble de una clase de sexto mientras que al especialista en pedagogía terapéutica se le amplía la jornada laboral a tiempo completo. Por contra, en otros colegios, como Anduva (470 matriculados), se han registrado bajas. Pierden al tutor de sexto, ya que desaparece uno de los grupos, y también les han retirado al profesor de compensatoria, que atiende a los alumnos que necesitan un mayor apoyo escolar. Algo similar ha ocurrido en Matillas (420 escolares), donde también han perdido una media jornada de profesor de compensatoria. En el resto de centros públicos (Príncipe de España, con 470 alumnos y Altamira con 250) no hay cambios y la plantilla es prácticamente la misma, salvo en Los Ángeles (203 alumnos), donde el profesorado varía mucho de año en año ya que «el 80%» de sus 18  maestros son interinos y se les asigna otro centro.

Ya la próxima semana comenzarán las clases en Secundaria, que en Miranda reúne a 1.347 alumnos mientras que en Bachillerato  habrá 412 estudiantes.

Salvo alguna excepción, prácticamente todos los colegios han potenciado el intercambio de libros de texto para que la factura de la vuelta al cole sea más llevadera. En algunos, como Matillas o Cervantes, el programa ha sido un éxito y «las familias nos han donado de forma voluntaria tantos libros como los que nos hacen falta para las familias solicitantes e incluso han sobrado», explican desde este último centro. Pese a la entrada en vigor de la nueva ley educativa, los libros no varían este año.

También el colegio Cervantes -que estrenó edificio el pasado curso junto al Centro Cívico- habrá por primera vez servicio de comedor para sus alumnos. En principio abrirá el 1 de octubre, aunque todavía se desconoce cuántas familias estarían interesadas. Hace unos meses, una primera encuesta señaló que al menos 40 niños se quedarían a comer si el centro ofreciera este servicio.