40 minutos en el bus no es calidad educativa

I.P. / Burgos
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El Procurador del Común atiende la queja de la localidad burgalesa de Santa Cecilia por la ruta que obliga a recorrer 41 kilómetros a 4 alumnos para ir a Lerma. Recomienda una línea específica para el pueblo

Los niños tienen entre 5 y 7 años y deben darse a diario un buen madrugón para ir al colegio. - Foto: Miguel Ángel de la Cruz

La resolución no es vinculante, pero el Procurador del Común deja claro que debe prevalecer el bienestar de los escolares de la localidad de Santa Cecilia inscrita actualmente a una ruta escolar que les obliga a madrugar más de la cuenta y hacer un recorrido de 40 minutos para llegar al colegio Pons Sorolla de Lerma, cuando apenas son 5,6 kilómetros los que separan ambas localidades. «El transporte de esos alumnos no se ajusta al principio de calidad que debe impregnar el sistema educativo o, al menos, no resulta satisfactorio y por ello es cuestionable como se presta». Más claro, agua.  

El informe de la institución regional responde a la demanda del alcalde de la localidad, Santiago Elena, que desde principio de curso inició una 'cruzada' ante lo que consideraba una pésima planificación de la ruta escolar en la que se incluyó a Santa Cecilia donde hay cuatro escolares entre  5 y 7 años que asisten al centro de la villa ducal. Así, la actual ruta parte de Lerma, entra a Santa Cecilia donde recoge a las 08,15 a los escolares y sigue camino de Villangómez, Montuenga y Madrigalejo del Monte por la BU-V-1411 y la BU-100 para llegar a Lerma a la hora de inicio de las clases, las 9 de la mañana, haciendo un trayecto de 41,2 kilómetros en 40 minutos aproximadamente.

Ninguna de las opciones que el regidor puso sobre la mesa en la Dirección Provincial de Educación, se han tenido en cuenta. Elena proponía dos rutas alternativas para minimizar el tiempo que los niños de su pueblo estén en el autobús. Por una parte, respecto a la ruta actual, proponía que tras salir de Lerma, el bus continúe por la A-1 y la BU-V-1012  y entre primero en Villangómez, Montuenga, Madrigalejo y finalmente, en Santa Cecilia, 

Para evitar perjudicar a los otros pueblos, ya que esta ruta es más larga, 50,1 kilómetros y 45 minutos de duración, la segunda propuesta municipal pasaba por sacar a Santa Cecilia de esta ruta e incluirla a la que hace el autobús-taxi de 8 plazas de Lerma a Ruyales del Agua, exclusiva para esta pedanía donde recoger a un alumno y viaja también una cuidadora. Elena proponía que esta ruta se modifique saliendo de Lerma y entrando en Santa Cecilia y luego seguir a Ruyales, aunque bien es verdad que no hay un camino directo y que habría que volver por Lerma, pero aun así el recorrido es de 15 minutos y no de 40, reconoce el alcalde. Al regreso, este proponía la ruta al contrario, primero dejar a los niños en Ruyales y luego en Santa Cecilia.

Tras realizar las pertinentes consultas a la Consejería de Educación, el Procurador del Común da por buenos los argumentos de la autoridad educativa en el sentido de resultar imposible el acceso a otras rutas, «dado que en un caso no se encuentran en el mismo trayecto (la de Ruyales) y en otros, perjudicaría a alumnos del resto de pueblos.

Aceptando esos argumentos, en todo caso, el Procurador del Común entiende que «el transporte de los alumnos del Pons Sorolla residentes en Santa Cecilia no se ajusta al principio de calidad que debe impregnar el servicio educativo de la Ley Orgánica 2/2006 de Educación», del tal manera que insta a la Consejería de Educación a que «considere la oportunidad de establecer una ruta de transporte escolar especifica para el alumnado de Santa Cecilia ante los inconvenientes que supone para ellos tener que hacer uso de la ruta Villangómez-Pons Sorolla, y dado que no se puede ofrecer otra alternativa utilizando el resto de rutas de transporte escolar al centro educativo», sentencia. El Procurador da un plazo de dos meses a la Consejería para que se pronuncie en el sentido de si acepta o no su propuesta.

El alcalde de Santa Cecilia, acogió de buen grado la propuesta del Procurador para que el pueblo tenga su propia ruta y reconoce que esa opción no la habían planteado por «no incrementar el coste que ello podría suponer para la Consejería de Educación», pero está abierto a esa opción o cualquier otra que no perjudique a los escolares de la localidad «pero tampoco a los de otros pueblos», puntualiza.