3.000 euros de multa por tocamientos a otra nadadora

I.E.
-

El Juzgado de lo Penal 1 condena a un usuario de la piscina cubierta de San Agustín por un delito de abuso sexual. El fallo avala que fue intencionado

Los hechos ocurrieron en la piscina de San Agustín. - Foto: Alberto Rodrigo

Un usuario de la piscina cubierta del centro cívico de San Agustín ha sido condenado como autor de un delito de abusos sexuales por «agarrar el glúteo y un pecho» a una nadadora «de manera intencionada». En una sentencia del Juzgado de lo Penal 1 de Burgos, que acaba de ser confirmada por la Audiencia Provincial, se le impone al acusado una multa de 3.240 euros.

Los hechos ocurrieron el 21 de julio de 2019 sobre las 13 horas. La víctima se hallaba nadando a crol con cabeza metida en el agua cuando, en un momento dado, notó «un pellizco grande con toda la mano en la nalga derecha».

Se levantó, se incorporó y vio que el autor había sido un hombre con gorro azul que nadaba de espaldas a mariposa. Intentó hablar con él pero no pudo, de modo que siguió dando brazadas. En un primer momento no quiso «pensar mal», tal como declaró en el juicio, pero tenía claro que no había sido un simple manotazo ni un roce. Sin embargo, al poco tiempo, y prácticamente en el mismo punto donde sufrió el primer agarrón, sintió que le cogían «el pecho derecho» de manera violenta. Se paró, se cogió a la boya y comprobó que se trataba de la misma persona, quien no se disculpó en ningún momento. Al salir de la piscina otra mujer le preguntó qué había pasado, a lo que ella le comentó que había sufrido dos agarrones por parte del mismo hombre. Su interlocutora le contestó que ella también. Después salió hacia el puesto de los socorristas y les relató lo sucedido, tras lo cual denunció los hechos ante la Policía Nacional.

(El relato completo de los hechos, en la edición impresa o aquí)