El presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales (CEOE) de Castilla y León, Santiago Aparicio, insistió ayer en el acto de reivindicación del Corredor Atlántico Noroeste en la importancia de implementar una conexión directa con el Mediterráneo para potenciar la logística ferroviaria nacional. Uno de los ejes «fundamental» en ese reto pasa por impulsar el trazaso Sagunto-Burgos, antigua línea Santander-Mediterráneo. «Tenemos que tener ese enlace muy en cuenta para la interrelación entre los dos corredores», reconocióAparicio.

El empresario se mostró convencido de que «todavía hay tiempo» para que el Gobierno de España eleve esta y otras propuestas de proyectos ferroviarios y las ponga sobre la mesa del Consejo Europeo. «Hay que incluir el Sagunto-Burgos, la unión entre el Mediterráneo y el Cantábrico», recalcó el líder de CEOE Castilla y León. En sus orígenes, este ferrocarril pretendía unir los puertos de Santander y Valencia, aunque únicamente operó entre Cidad-Dosante, en la Merindad de Valdeporres, y la localidad zaragozana de Calatayud. En estos momentos la línea se encuentra desmantelada a excepción del ramal del polígono de Villalonquéjar y de la estación de Soria. Sus inicios se remontan a 1930, mientras que la clausura llegó el 1 de enero de 1985. «No sabemos si llegamos tarde o en el momento adecuado, pero creemos que tenemos un recorrido importante», indicó.

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