El relevo al frente de las operaciones sobre el terreno ya está preparado, pero el brillante ciclo liderado por Juan Luis Arsuaga, Eudald Carbonell y José María Bermúdez de Castro aún tiene muchas que decir antes de su retirada de la primera línea. Los yacimientos de Atapuerca viven durante estas semanas una campaña muy positiva y ese trabajo allana el terreno para iniciar a partir de 2024 una serie de hallazgos llamados a hacer historia con mayúsculas. El descubrimiento de Pink el pasado año solo es el principio de una etapa muy ilusionante para un proyecto que dejará una huella imborrable y que dará paso a un futuro esplendoroso. El triunvirato disfruta del momento antes de su despedida el próximo verano al mando de las excavaciones (Juan Luis Arsuaga estará hasta 2025), pero los investigadores seguirán al pie del cañón en una Fundación Atapuerca que ya piensa en su XXV aniversario.
Después del gran impacto de la campaña de 2022, ¿qué balance hacen hasta el momento de estas semanas de trabajo de 2023?
Juan Luis Arsuaga (J.L.A.).- Aún queda campaña por delante, pero lo cierto es que va muy bien en todos los sentidos. Todos los yacimientos están produciendo y estamos encontrando fósiles y utensilios muy interesantes. No solo para el público, también para los investigadores.
Eudald Carbonell (E.C.).- Es el caso de lo ocurrido en el Penal. Ese descubrimiento (un canto tallado y una lasca de hace 800.000 años) refleja la continuidad de la Gran Dolina y complementa otros trabajos.
José María Bermúdez de Castro (J.M.B.)- Los yacimientos están produciendo hallazgos sensacionales y hay muchísimo material. Parece que siempre estamos pendientes de los restos humanos, pero hay mucho más.
¿Qué tesoros oculta el nivel TD6?
J.M.B. - Ahí es donde apareció el homo antecessor entre 1994 y 1996 y luego en 2003. Teníamos previsto que en el último año de nuestra dirección se volvieran a encontrar nuevos restos allí y tenemos casi la seguridad de que va a ser así.
E.C.- Esta próxima semana estará preparada toda la superficie del nivel 6 de Gran Dolina. Si todo sale como está previsto, entraremos en una secuencia de descubrimientos excepcionales en 50 metros cuadrados. Estoy convencido de que cuando empiece allí una excavación sistemática encontraremos centenares de fósiles. Esa será una de las herencias de futuro porque completar todos los restos anatómicos de esta serie cambiará lo que conocemos de estos grupos de hace un millón de años.
J.L.A.- Estamos hablando de ser el mejor yacimiento del mundo de fósiles. Este año ya está siendo buenísimo porque abarcamos muchos periodos de tiempo.
Otro hallazgo reciente fueron los suelos preparados para vivir del periodo neolítico. ¿Qué indica este tipo de descubrimientos?
J.L.A.- Nos habla de los primeros agricultores y ganaderos del interior peninsular. De ahí hemos sacado muchísima información como, por ejemplo, de ADN. Lo que sabemos hoy en día de los pobladores europeos y de su contribución es muy importante. De hecho, se ha publicado un estudio que dice que el primer neolítico norteafricano era de origen ibérico.
¿Estos hallazgos premian todo el esfuerzo o hay algo más reconfortante en su tarea?
E.C.- Tener en las manos esta responsabilidad de encontrar toda la secuencia de ocupación humana hasta la época romana no se ha hecho en otro lugar. Sin embargo, además de aprovisionar la socialización de la evolución humana, para mí lo más importante de nuestra labor es la gran cantidad de gente que hemos formado a lo largo de estos años. Arqueólogos, paleontólogos, geólogos, botánicos... es de lo que me siento más orgulloso porque tenemos una cantera excepcional.
J. L.A.- Y el Centro de Interpretación, el Museo de la Evolución, los másters, la academia, la investigación... las campañas de excavaciones duran mes y medio y en torno a eso se ha creado una infraestructura que ha convertido a Burgos en la capital mundial.
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¿Lo mejor de los yacimientos está por llegar?
J.L.A.- 2024 puede ser el mejor año. Coincidirá con nuestra última campaña juntos y con el XXV aniversario de la Fundación. Esperamos grandes descubrimientos, pero todavía quedan cosas por hacer en este 2023.
E. C.- Si todo sale como esperamos, el próximo año será el mejor de la historia para los yacimientos de Atapuerca.
J.M.B.-Se vienen hallazgos importantes en los dos próximos años. Pueden aparecer cosas y tenemos mucha ilusión.
(La entrevista completa, en la edición impresa de este domingo de Diario de Burgos)