Han pasado 25 años del estreno de la película El milagro de P. Tinto (1998), mismo tiempo que el Expreso Pendular del Norte tardaba en regresar al aislado valle de La Revilla en el filme, donde P. Tinto y Olivia se instalaron para formar un hogar. Ayer, ese tren visitó de nuevo al apeadero abandonado de la estación Santander-Mediterranéo para conmemorar el aniversario del largometraje, dirigido y rodado en La Revilla por Javier Fesser (Campeones). Un cuarto de siglo después, el lugar no ha cambiado en absoluto. 

«Está exactamente igual que como lo dejamos. Cada hoja y cada árbol me recuerda a los momentos que vivimos aquí rodando la película», recordaba ayer Fesser tras regresar al apeadero un cuarto de siglo después. En 1997, durante el rodaje de la película, tanto el director y los actores, como el equipo de producción soñaban con poder dedicarse al cine y vivir de ello. El de P. Tinto fue el primer largometraje del madrileño, luego vinieron los dobles éxitos de Campeones y Mortadelo y Filemón, pero en el fondo, Fesser confesó que daría todo por «repetir la experiencia tan enriquecedora de filmar la primera película». Especialmente porque fue la primera de casi todos los que participaron en ella. De Fesser, de su socio y productor Luis Manso, del actor Janfri Topera, o del director artístico César Macarrón, entre otros. 

El rodaje estuvo pasado por agua, pero lejos de ser un inconveniente, la lluvia proporcionó una escena que el equipo nunca había logrado imaginar. La luz de un cielo limpio lleno de nubes de todos los colores, un paisaje brillante debido a que el agua dejaba las hojas y el campo reluciente, y una imagen muy nítida. Esas cuatro semanas que pasaron en La Revilla, en las que llovió ininterrumpidamente cada día conforman para todos el recuerdo principal de los tres meses que duró el rodaje. 

El director confesó que las semanas que pasó en La Revilla son el recuerdo principal de los tres meses que duró el rodaje. - Foto: Luis López Araico

En él, Janfri Topera, que da vida al profesor Bacterio en el filme de Mortadelo y Filemón, se estrenó como actor.  «Fue hacer esta película y comenzar a hacer cine y televisión. Además, hacerlo en mi ciudad fue algo espectacular», afirmaba ayer durante la celebración, que incluyó diversas actividades como juegos infantiles populares, un chupinazo en la estación Santander-Mediterráneo, una carrera Gogó y la presentación y proyección de la película en las últimas horas de la tarde. 

La iniciativa surge de Burgos Film Comission, compañía que nace a partir de un convenio entre Promueve y Sodebur para buscar atraer nuevos rodajes a nuestra ciudad. Y es que como ya han demostrado El milagro de P. Tinto o El Bueno, el feo y el malo, capital y provincia componen un rico, diverso y bello escenario cinematográfico aún sin explotar. 

Nuevos proyectos. Javier Fesser y Luis Manso trabajan mano a mano desde 1997 en su productora Películas Pendelton, y ahora van a embarcarse en un proyecto que les hace especial ilusión. Manso contaba a este periódico la propuesta que les ha hecho Bobby Farrely, productor del remake americano de Campeones, Champions, con Woody Harrelson como protagonista, de rodar una nueva película en Estados Unidos. 

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«A Javier le han sugerido dirigirla y a mí estar entre los productores. Nos hace especial ilusión pero dependemos de fechas y actores importantes», aclaró Manso. Según aseguró este, el reparto podrían conformarlo Harrison Ford y Diane Keaton, entre otros.