«No queremos más, pero tampoco queremos menos». El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, urgió al Gobierno central, desde la «máxima lealtad institucional», a dotar al eje Atlántico de una «financiación adecuada y suficiente», aprovechando «la oportunidad sin precedentes» que existe con los fondos europeos, porque sostuvo que ahora «llaman a la puerta» los derivados del marco Next Generation. «Debemos dar un paso adelante para que no nos quedemos atrás», afirmó el jefe del Ejecutivo autonómico durante su intervención en la jornada 'Corredor Atlántico Noroeste', donde llamó a evitar una «España hemipléjica». Para ello, demandó al Gobierno de España dar «pasos decididos» para impulsar este eje del noroeste, y lo contrapuso con la ejecución de las inversiones e infraestructuras del Mediterráneo.
El máximo dirigente autonómico puso en valor la unidad de Castilla y León, Asturias y Galicia que, pese a tener gobiernos de distinto signo político, suman sus fuerzas para impulsar este enclave logístico y crear oportunidades de futuro en sus territorios. Es evidente, dijo, que las tres autonomías tienen «mucho potencial» y muchas mercancías, «competitivas en cualquier mercado», pero que necesitan las infraestructuras del transporte necesarias para llegar a ellos. En ese sentido, Mañueco indicó que este es el momento para que las tres comunidades, «sin mirar hacia otro lado», exijan lo que consideran «justo».
Fernández Mañueco señaló que más allá de las inversiones de los Presupuestos Generales del Estado para 2023, que recogen una partida similar para el Atlántico y el Mediterráneo, se atienda al «desequilibrio» existente en la ejecución de las mismas. Por ello, aprovechó para exigir el «mismo trato» para ambos corredores. El presidente de la Junta sostuvo que el Corredor Atlántico es una infraestructura necesaria para la «cohesión» económica, social y territorial, ya que supone un «beneficio» para las nueve provincias de la Comunidad, incluidas las más alejadas del noroeste, como Soria, y también para toda España y Europa. «Queremos avanzar», reiteró Fernández Mañueco para «llegar más lejos» y abrir «más puertas a las oportunidades» de futuro.
Barbón y Rueda
Más beligerante fue el discurso del presidente de Asturias, Adrián Barbón, –del mismo signo político que elGobierno central–, quien proclamó que para él es «Asturias, lo primero, con sus hermanas que son Galicia y Castilla y León». Por eso consideró que «claro que hay que alzar la voz», toda vez que «los nuevos desequilibrios de desigualdad se miden en el eje este-oeste». «Por eso hoy estoy aquí», argumentó, antes de apuntar a la «deuda histórica» con el noroeste. «Esto no va de colores políticos», apuntó por su parte el titular de la Xunta, Alfonso Rueda, después de hablar Barbón, que apostó por «pasar de las declaraciones a los hechos» y «trabajar por el reequilibrio».