UBU: 2 millones para avanzar en transición ecológica y digital

B.G.R.
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Obtiene fondos para 14 proyectos de investigación. Siete se desarrollarán en la Politécnica, cinco en Ciencias, uno de Económicas y otro de Derecho. El resultado supera todos pronósticos del campus

La financiación incrementará la producción científica del campus. - Foto: Jesús J. Matías

Ni las expectativas más optimistas hacían pensar a la Universidad de Burgos los resultados que iba a obtener en la convocatoria del Ministerio de Ciencia e Innovación para financiar proyectos estratégicos de investigación sobre transición ecológica y digital, la primera de estas características al estar enmarcada en los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Tras una criba inicial, su porcentaje de éxito ha llegado al 74% al haber logrado financiación para 14 de las 19 propuestas presentadas a finales del año pasado y que tendrán que estar acabadas antes del 31 de diciembre de 2023 si no se consigue una prórroga, posibilidad que estudia ya solicitar la Conferencia de Rectores (CRUE).

Traducido en euros, la institución recibirá casi dos millones, de los cuales uno irá a parar a la Escuela Politécnica Superior, que ha recibido el visto bueno para 7 trabajos científicos. Otros cinco se quedarán en la Facultad de Ciencias, que consigue 781.022 euros, mientras que la relación se completa con sendos estudios a desarrollar en la Facultad de Económicas (por importe de 151.225) y en la de Derecho (24.955 euros). 

Conocida la resolución, el vicerrector de Investigación, José Miguel García, no duda en calificarla de «espectacular» por haber superado con creces las previsiones iniciales. «Con ocho proyectos ya lo considerábamos un éxito y diez era lo máximo que creíamos poder conseguir», subraya, justificando estas expectativas en la dificultad que entraña el criterio de concurrencia competitiva que recogen las bases, así como que las propuestas objeto de valoración tenían que contar con «un alto componente de aplicación práctica».

Este debía de estar relacionado de forma directa con el «espíritu» de la línea de ayudas, que pasa por  «trabajar en la resolución de problemas ligados a la transformación digital y ecológica» a medio o incluso a corto plazo. Dentro de estos campos se encuentran los proyectos seleccionados, que en el caso de la Politécnica tienen que ver con la prevención de riesgos laborales a través de tecnologías como la realidad virtual; el reciclaje de palas de molinos eólicos, un problema al que, según García, «debe buscarse una solución inmediata», o la componente de prácticas agrícolas y su contribución para el aumento de carbono orgánico en el suelo. El trabajo que ha recibido mayor financiación (304.750 euros) tiene que ver con el uso del hidrógeno como vector energético o generador de energía como alternativa real a los combustibles fósiles.

En la Facultad de Ciencias, el vicerrector explica que algunas de las propuestas financiadas buscan la valorización de la biomasa, la producción de biogás y absorción de CO2, o la optimización de usos de los plásticos alimentarios. Por su parte, en Económicas se avanzará en la economía circular, al igual que en Derecho, centrado en el campo de la contratación pública.

García hace extensible la valoración positiva del resultado de la UBU al del resto de instituciones públicas de Castilla y León, donde la Universidad de Valladolid ha conseguido 22 proyectos por 3,5 millones de euros, la de Salamanca 16 y más de 2,2 millones, los mismos que la de León. «Es una señal de la fortaleza que tiene la Comunidad en el campo de la investigación», subraya, al tiempo que pone como ejemplo que la Complutense ha logrado 32 y es «más grande que todo el sistema regional».