¡Con las manos en la tapa!

R.E.M. / Sotopalacios
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Las familias y los grupos de amigos de Sotopalacios se meten en los fogones de Rural Chef para elaborar el mejor pincho con productos locales como la morcilla o el chorizo. Gran participación, algunos nervios y mucha diversión

Los participantes se encargaron de seleccionar los productos necesarios para sus tapas, pero con clásicos como la morcilla o el chorizo como ingredientes básicos. - Foto: Luis López Araico

Preparados, listos, ¡ya! Comienza la carrera por conseguir la mejor tapa de Sotopalacios y la competición en la cocina está servida entre los nueve equipos aspirantes. Todos con las manos en la masa para conquistar al jurado y demostrar quién 'juega' mejor con los productos típicos de la zona. No faltan los nervios ni tampoco la diversión.

Saúl, Eva y Yolanda ya triunfaron el año pasado en la primera edición del Rural Chef y para esta ocasión conservaban la misma ilusión. Tienen entre 16 y 17 años, pero demuestran que la cocina no entiende de edades. Entre sus planes estaba realizar unas tapas de ensaladilla rusa, unas patatas bravas y morcilla enrollada de panceta. No les tiembla el pulso y aseguran que también cocinan en casa. Aunque una prueba así anima mucho más a ponerse el delantal.

Ingredientes básicos como el aceite o las verduras estaban sobre las mesas para que los 36 participantes pudieran iniciar sus creaciones, mientras que en el centro de la carpa se podían encontrar un sinfín de productos para que cada uno le diera su toque único. Los equipos tenían su propia placa de inducción y ahí empezaban a freir la cebolla, los pimientos, el huevo, la morcilla... Algunos con rodajas de pan, otros con las tortillas de trigo para fajitas. Ideas muy diferentes, para comer en frío o en caliente, pero todas hechas con la intención de conquistar paladares.

Se animaron a concursar 36 personas, divididas en nueve equipos.Se animaron a concursar 36 personas, divididas en nueve equipos. - Foto: Luis López Araico

"El año pasado lo hicimos y fue un exitazo, por lo que ahora lo hemos repetido", decía Roberto Cuadrado, técnico del Ayuntamiento, sobre esta actividad que han preparado con motivo de las fiestas. A la vista de la participación y el empeño que ponían, la cita volvía a resultar un verdadero éxito. Además, esta vez estaba perfectamente controlado el tema de la luz para evitar los cortes que tuvieron el año pasado al tener tantos aparatos funcionando a la vez. Hornos, cazuelas, thermomix, batidoras... todo funcionaba a pleno rendimiento. No se podía llevar nada de casa y había que aprovechar cada minuto de la hora y media que tenían.

Tampoco faltaban los curiosos que miraban desde la barrera. "¡Hay muchísima gente joven este año!", exclamaban unas mujeres. "Se les ve muy intensos y con rapidez para cocinar, tienen muchas ganas", afirmaba Ana Clara Carbajo, que ejercía de jurado. Además, comentaba que cada vez participan más adolescentes en estas pruebas y cree en eso han influido los concursos de la televisión. "Está bien que se interesen en el sector", decía. Ella conoce perfectamente el mundo de la cocina y ha abierto en Frómista (Palencia) el obrador Meraki Pastelería Inclusiva, que pronto llegará a Burgos.

La iniciativa la desarrolla Víctor M. Carranza, procedente de Palencia, que exponía que sirve para "hacer promoción del producto actóctono" y también para dar difusión a las ferias y fiestas de los pueblos, como ya hicieron en Castrojeriz con su famoso ajo. Una magnífica forma de aprender y disfrutar.