Hace un año el Mirandés tomaba la drástica decisión de despedir a Gonzalo Arconada, entrenador que había comenzado la temporada como recambio de Carlos Pouso. Una medida que no fue compartida por parte de la afición rojilla ya que además llegaba con un Mirandés que estaba salvado y cuando apenas se había cumplido un tercio de la competición. Ese hecho motivó la llegada de Carlos Terrazas al banquillo rojillo, que aunque no logró la permanencia, el descenso administrativo del Murcia le colocó de nuevo en Segunda, por lo que puede hacerse un análisis de lo que los datos aportan en las tres temporadas en Segunda con cada uno de los técnicos que ha tenido el equipo.

El primer hecho es que ésta es la mejor temporada del Mirandés alcanzada la jornada 17, que en la pasada temporada significó la penúltima de Arconada ya que este año la Liga ha empezado una semana más tarde. Con Terrazas, a pesar del irregular arranque, se ha conseguido llegar a la novena posición tras una racha de cuatro victorias. 

Hace un año la distancia existente con la parte alta era mayor, ya que el Mirandés estaba decimoquinto en la tabla, mientras que con Carlos Pouso, el técnico que ascendió con el equipo y con el que se estrenó en Segunda, en este mismo momento de la competición se vivía como último de la clasificación siendo farolillo rojo en solitario.

La paridad de la Liga Adelante hace que en puntos las diferencias sean menores, a menos en lo que a las dos últimas temporadas se refiere. Ahora, los rojillos atesoran 24 puntos en su casillero, que son solo dos más que los que tenía Arconada disputadas 17 jornadas. La diferencia se eleva con el año de Pouso, en el que solo se sumaban 13, si bien es cierto que el debut de los rojillos en la categoría acabó ese año con la salvación deportiva del equipo gracias a una extraordinaria segunda vuelta.

En cuanto al comportamiento en Anduva y lejos del estadio, el Mirandés de Terrazas y el de Arconada se igualaba, ya que con ambos entrenadores se habían ganado hasta la fecha cuatro partidos, con dos empates, mientras que las derrotas fueron una más con Arconada, si bien también se había jugado un choque más en casa que este año. El míster de Leioa, por su parte, selló una única victoria en casa en ese mismo periodo.

Fuera, el actual entrenador acumula tres victorias, un empate y cinco derrotas, mejorando los datos de Arconada en los partidos ganados, pero empeorando en los empates y las derrotas (este año se ha jugado uno más fuera que el pasado). Cinco derrotas también acumuló Pouso, que en 9 jornadas fuera solo había ganado una, empatando las otras tres.

La estadística goleadora favorece mínimamente a Arconada en el periodo de la 17 primeras jornadas, ya que el equipo acumuló 17 tantos a favor, uno más de los que ahora se llevan con Terrazas y cuatro más que lo que se lograron con Pouso. En cuanto a los encajados, el de Terrazas es el Mirandés más sólido, con 18 goles en contra frente a los 20 de Arconada y los 20 que también metieron a los rojillos en el primer año en Segunda.