Gómez señala a la Policía Local por presionar con las bajas

Ó.C.
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El concejal de Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento de Miranda critica la utilización de estos partes para presionar y lograr una subida salarial. El absentismo llega al 48% y solo hay disponibles 19 agentes

De la plantilla de 37 agentes, 18 están de baja médica. - Foto: A.B.

El choque entre la plantilla de Policía Local y el Ayuntamiento de Miranda ha subido de nivel. Las fiestas patronales abrieron todavía más la herida sangrante, ya que once agentes cogieron la baja durante los cinco días de programación. El concejal de Seguridad Ciudadana, Pablo Gómez, denunció la medida de presión y criticó que todas estas maniobras tienen como objetivo conseguir un incremento salarial.

«Todos sabemos de lo que estamos hablado», afirmó el responsable de la Policía Local de la ciudad, que tiene dudas de mantener el diálogo para desbloquear la situación y dejó una pregunta abierta: «¿Tú te sentarías a negociar con los que han hecho en fiestas lo que han hecho?».

La realidad del servicio resulta complicada y además el concejal avanzó que llevaría los casos a la inspección médica. A las once bajas presentadas durante las fiestas hay que sumar otras siete que venían de antes. Los agentes fuera de servicios «a fecha de 14 de septiembre son 18», lo que deja una tasa de absentismo del 48%, pero el responsable puntualizó que «dentro de estas personas hay alguna que se encuentra dentro de un estado de salud delicado». Más allá de cada caso en particular, el concejal espera mantener las patrullas pero admitió que «no es lo mismo un servicio con el 100% de su plantilla que con un 52%». El cuerpo queda por lo tanto con 17 agentes, a los que hay que añadir los cinco aspirantes que se han incorporado esta misma semana en prácticas. Al margen de las cifras, Gómez matizó que «no me gustaría porque no sería cierto trasladar una imagen de inseguridad».

El concejal remarcó que las fiestas se celebraron «sin ningún tipo de incidente destacable», pero del 8 al 12 de septiembre la ciudad notó la falta de policía, sobre todo en aspectos como la regulación del tráfico (...).

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