El Real Madrid venció este sábado por un holgado 73-83 al Joventut de Badalona, con 25 puntos del alero bosnio Dzanan Musa, y neutralizó así el empuje del Pavelló Olímpic, testigo de un recital del equipo merengue para establecer el 2-1 en este Playoff de semifinales de la Liga Endesa.

La cancha verdinegra, engalanada para el tercer duelo de esta serie, tenía motivos para creer en la campanada ante el vigente campeón de la ACB y flamante ganador de la Euroliga. Así, la excelsa aportación ofensiva de Kyle Guy en el primer encuentro había hecho saltar las alarmas entre los madridistas, que se vengaron 48 horas después.

Con 1-1 en el cómputo global, al Olímpic le tocaba medir si habría otra sorpresa o si se impondría el poderío del gigante. Y Musa se encargó de que el Real Madrid tuviera alfombra roja desde el inicio. Los visitantes nunca soltaron la delantera en el marcador, merced a un parcial de 2-16 que allanó el camino del primer periodo.

El Real Madrid neutraliza al Olímpic y se acerca a la final - Foto: Enric Fontcuberta

El pívot francés Guerschon Yabusele dominaba bajo tableros, sin necesidad de que el caboverdiano Edy Tavares aportase puntos. A los pupilos de Chus Mateo les salía todo en un segundo cuarto en el que mantuvieron a raya al Joventut, encomendado a un Kyle Guy demasiado solo en ataque.

El 32-48 que reflejaba el electrónico del pabellón al descanso ya dejaba claro que no era el día de los locales. De hecho, el parcial acumulado del tercer periodo (11-22) supuso la sentencia para el cuadro badalonés, en cuyas filas tan solo el pívot sueco Simon Birgander aguantaba el ritmo de Kyle Guy en tareas ofensivas.

La actuación más coral del Real Madrid, con fluidez en los pases, provocó que la diferencia en el marcador incluso se fuera hasta los 30 puntos (37-67). Faltaban aún 4:26 para cerrar ese tercer periodo, pero los jugadores entrenados por Carles Duran no hallaban el modo de hacerle daño a un adversario en estado de gracia.

Parcial de 23-3 que hace soñar al Joventut

El cuarto capítulo arrancó con un 43-70 que, pese a todo, no impidió que el Joventut sacase arrestos. Guillem Vives abrió las hostilidades con un triple, Joel Parra dio continuidad a esa jugada con otra canasta para la esperanza y Simon Birgander acumuló más tiros con puntería. De repente, la persiana se le había bajado al conjunto merengue.

El plantel de viejos roqueros con Sergio Rodríguez, Sergio Llull y Rudy Fernández a la cabeza, fue agotando su catálogo de recursos y el aro se le hizo pequeño al Real Madrid. Ya no aparecía Mario Hezonja para ayudar a Musa y, además, Tavares solo destacaba en el aspecto reboteador.

Chus Mateo echó de menos los puntos del caboverdiano en las alturas, pero los gradas del Olímpic bien que lo disfrutaron. Su equipo firmó un parcial de 23-3 en el último cuarto, pasando desde el 50-75 hasta el 73-78. Apretó los dientes el cuadro visitante, Mateo volvió a recurrir a Tavares en los compases finales y el Joventut murió en la orilla.

Dos tiros libres encestados por Musa, junto a un mate de Yabusele al contragolpe, abrochó el triunfo visitante (73-83). Tampoco entró un par de lanzamientos lejanos de Guy, a la desesperada. El escolta de Indianápolis recordó al del primer duelo de esta semifinal, pero el desenlace fue tan amargo como en el segundo partido.

Después de este tercer enfrentamiento, el club madridista se situó a una victoria más de su billete hacia la final por el título. Intentará conseguirlo el próximo lunes a partir de las 21.00 horas) y en el mismo escenario, durante un cuarto envite en el que ya no habrá margen de error para el equipo de Badalona.