El 'boom' del reparto a domicilio se cobra 13 vidas en 10 años

G. ARCE / Burgos
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Velocidad, distracciones, precariedad laboral y muchas horas al volante de las furgonetas están detrás de estos sucesos. La alternativa del control con tacógrafos aún no se contempla

13 víctimas mortales (la última este año), 27 hospitalizados y 268 heridos leves en accidentes con vehículos de transporte a domicilio implicados. - Foto: Luis López Araico

Es la otra cara del Black Friday (que se vivirá este último viernes de noviembre) y del exitoso comercio electrónico. Unos tiempos de reparto infernales, muchas horas al volante de las furgonetas, prisas permanentes, distracciones y accidentes de tráfico. En lo que va de año se han registrado 233 y en los últimos diez se han rozado o superado ampliamente los 300 siniestros anuales vinculados a la denominada 'última milla' del envío de compras a hogares y empresas.

El balance de una década preocupa y mucho en la Jefatura Provincial de Tráfico: son 13 víctimas mortales (la última este año), 27 hospitalizados y 268 heridos leves. El transporte en vehículos que cargan hasta los 3.500 kilogramos de peso se ha convertido en uno de los más peligrosos e incontrolables, especialmente, tras el extraordinario boom de las compras desde los hogares. 

Las furgonetas mueven en la actualidad un peligroso coctel de problemas que no tienen una única solución: precariedad laboral, jornadas maratonianas, mucho estrés, cansancio e incluso falta de experiencia al volante de este tipo de vehículos. Por si fuera poco, son un negocio rentable y una alternativa al camión en las distancias cortas. 

Tráfico no solo controla las furgonetas que transportan paquetería -por lo general, ocupadas por una sola persona conductora y repartidora-, sino también aquellas que transportan a viajeros, en muchos casos cuadrillas de trabajadores que se desplazan tras la semana laboral a descansar a otras provincias limítrofes o a Portugal. 

«Les detectamos habitualmente los viernes por la tarde, circulando a toda velocidad con destino a sus hogares y tras una dura jornada laboral... Recorren muchos kilómetros. Ha habido casos de somnolencia al volante y salidas de vía que han sido y pueden ser mortales para todos», relata Raúl Galán, jefe provincial de Tráfico.

Hay un tercer ámbito en el que también se ha centrado la atención de este organismo: el de las furgonetas de alquiler, que han proliferado en los últimos años. La falta de experiencia de sus conductores (muchos de ellos particulares) y el desconocimiento de las reglas básicas de estiva de estos vehículos son fuente de preocupación en Tráfico.

Pandemia. Pero el mayor número de accidentes a lo largo de la última década se ha vinculado a la dinámica también creciente del comercio electrónico, que ha aumentado su actividad a un ritmo de dos dígitos porcentuales año tras año, lo que supone muchos viajes de reparto. Ni el ejercicio 2020, con las restricciones al tráfico rodado propiciadas por la pandemia, se libró de esta siniestralidad, con 240 accidentes en su balance.

Ha habido años con cerca de 360 siniestros (2017 y 2018), aunque la tendencia de los últimos es a la contención de las cifras e incluso a su estabilización. La explicación a este fenómeno no está clara, pues los problemas en este sector no han desaparecido, sino que se están agravando.

Tacógrafos. El debate en torno a la implantación de los tacógrafos que controlen los horarios al volante (como ocurre con los camiones) sigue vivo, pero es una competencia exclusiva de Transporte. «Tráfico es partidario de su uso, porque es una actividad de transporte de riesgo, sometida a una presión muy grande durante muchas horas», explica Raúl Galán, jefe provincial de Tráfico, quien adelanta que no hay avance alguno sobre esta implantación. 

«Desde el punto de vista de la seguridad vial es una medida muy positiva, aunque hay muchos sectores empresariales contrarios a un control a mayores de horas al volante y de descansos en este ámbito».
Es decir, hay un choque de intereses entre seguridad vial y legislación laboral y, por medio, un comercio digital que ha disparado el negocio de la paquetería. 

Los afectados son, en muchos casos, trabajadores autónomos y subcontratados, que cobran 'a peso' por el número de paquetes entregados a tiempo en destino. Su actividad se extiende durante la jornada semanal y los fines de semana y ya está controlada por los GPS de seguimiento de los pedidos. Añadir un tacógrafo supondría una traba más para muchos.

«Dicho esto, mi opinión es que las empresas pierden más por la siniestralidad y las bajas generadas por las carreteras que controlando más estrictamente los horarios al volante», sentencia Galán.

Campaña. Tráfico no es competente en el ámbito laboral ni en el transporte, pero sí en todo lo que se refiere a la seguridad de las carreteras. De hecho, desde este lunes hasta el próximo domingo se pondrá en marcha una campaña de control de las furgonetas en Burgos. Coincide, lógicamente, con los días de mayor volumen de comercio electrónico del año generados por la campaña de descuentos masiva del Black Friday y, en menor medida, del Cyber Monday (el lunes 27).

El comercio electrónico ha mantenido un crecimiento constante durante todo el año, y todo apunta a que será más pronunciado durante esta campaña de descuentos, ya que las ventas a través de internet aumentarán, alcanzando un volumen de pedidos un 45% mayor que en el mismo periodo del año anterior.

Si se dan por buenos los pronósticos, los burgaleses gastarán online una media de 162 euros en el Black Friday y el Cyber Monday, jornadas que, además, dan el pistoletazo a la campaña de Navidad, lo que supone un incremento del 20%, respecto al año pasado, según datos que baraja el sector del comercio digital.