Cambio de cromos en el banquillo

J.C.M. / Burgos
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La marcha de Julián Calero tras tres temporadas provocó la llegada de Jon Pérez Bolo para dirigir una plantilla en la que se mantienen 14 futbolistas y han llegado siete fichajes

Julián Calero, a la izquierda y Jon Pérez Bolo - Foto: Luis López Araico Jesús J. Matías

La afición del Burgos CF ha vuelto a disfrutar del fútbol profesional en este 2023. Y lo ha hecho después de un giro importante en el proyecto deportivo del club. Julián Calero anunció su marcha del club después de tres años inolvidables y Michu no tardó en mover ficha y contratar a Jon Pérez Bolo para el banquillo blanquinegro. Ha sido un cambio de cromos en una proyecto que sigue controlado por Michu al frente de la dirección deportiva.

Con un límite salarial muy parecido al de la anterior temporada, el director deportivo trabajó durante 2023 para afianzar una plantilla con buenos mimbres a los que había que retener y consolidar el bloque que tantos éxitos había dado al Burgos. Varios jugadores tenían contrato y a otros había que ampliárselo pero en definitiva Michu logró retener a 14 futbolistas, aunque algunos como Fran García o David Goldar salieron del club. Lo más importante es que se mantenía el entramado defensivo que tantos éxitos había dado y que se logró retener a los dos futbolistas que más habían brillado, Curro Sánchez y José Antonio Caro. El primero de ellos tuvo opciones para salir durante el verano, incluso hubo negociaciones, pero finalmente el futbolista sevillano sigue en el Burgos y se ha convertido en una pieza indispensable. De hecho, es el máximo goleador del equipo, con nueve tantos. También sigue Caro, pese a los continuos rumores sobre su marcha. Y junto a ellos los Elgezabal, Aitor Córdoba, Matos, Raúl Navarro (renovado una temporada más), Borja, Grego Sierra, Atienza, Mumo, Andy y Bermejo. 

Con el bloque definido, Michu trabajó en los fichajes. Han sido siete incorporaciones, la mayoría de ellas en la zona de ataque, en la que el Burgos ha dado un paso de calidad. Es cierto que perdió a Gaspar Campos pero han llegado futbolistas contrastados en la categoría y otros con enorme proyección. Para las bandas Michu ató a Dani Ojeda, llegado de la Ponferradina, y Sancris, procedente de la Primera RFEF que con mucho futuro por delante. Lo mismo que Ander, de la cantera de la Real Sociedad y que puede alternar varios puestos en la zona izquierda. Y para la punta de ataque Michu ató a Edu Espiau, un trabajar incansable en el área; y a Fer Niño, una de las perlas de la cantera del Villarreal B y que ya ha dejado muestras de su enorme calidad.

En defensa compensó la salida de Goldar con la llegada de Saveljich, pero se ha lesionado y el club tendrá que fichar a un nuevo jugador. Y para el centro del campo se contrato a Appin, un futbolista con un poder físico impresionante.