Los centros públicos de Secundaria de Miranda están al límite de su capacidad. En el IES Montes Obarenes y el Fray Pedro de Urbina reconocen que tratan de encajar todas las piezas de un puzzle que cada vez resulta más difícil de terminar, por lo que desde los dos espacios educativos acaban con la misma reflexión: hay que construir un nuevo instituto en la ciudad. Ambos, explican sus peculiaridades, como el peso que tienen en Obarenes los estudiantes incluidos en la atención a la diversidad, ya que 150 de sus 700 inscritos están dentro de esta alternativa. En común, resaltan el incremento del alumnado y la falta de espacio, una mezcla que obliga a pensar en una solución para los próximos cursos.

En Fray Pedro están a la espera de que la Formación Profesional se mude al CIFP Río Ebro, lo que liberaría espacio, en especial, en la zona de los talleres. Aun así, la ampliación del centro de FP no termina de llegar y no saben cuándo concluirá, por lo que asumen «que tenemos que mantenernos con lo que tenemos». Por eso, inciden en la alternativa de un nuevo instituto, porque apuntan a los datos para mostrar que cada vez tienen más demanda. Cuando el nuevo equipo directivo asumió la dirección, contaban con 690 jóvenes aproximadamente y la estimación con la que trabajan para el próximo 2023/2024 eleva la cifra de escolares hasta rozar los 950. 

La subida supondrá un grupo más de 1º de ESO -para alcanzar los siete-, otro de  4º, varios más de diversificación en la educación obligatoria, más las clases para el nuevo Bachiller de Artes Escénicas. Esto se traduce en una necesidad de aulas, lo que obligará a una reestructuración. Para empezar tendrán obras este verano, porque deben de acondicionar espacios, desplazar la biblioteca y trasladar varios departamentos. Pese a todo, con el mencionado incremento de una nueva línea en el inicio de la ESO los quebraderos de cabeza ya corren al curso 2024/2025. En ese momento reconocen que «no sabemos cómo lo vamos a poder hacer y va a ir a peor», puntualizan en el equipo directivo, donde añaden que las matriculaciones durante estos meses, con el año lectivo ya empezado, «han sido notables».

En el IES Montes Obarenes admiten que también notan el aumento de la escolarización. En la actualidad suman más de 700 alumnos y si hay alguna variación apuntan a un incremento. No obstante, desde este instituto añaden otro factor, los desdobles, «porque hay grupos que en una misma hora ocupan dos o tres espacios». Por contra, en los últimos cursos han perdido aulas específicas de las distintas asignaturas para reconvertirlas y que sean de referencia para cada clase, «y la previsión es que sigan aumentando», reflexionan. Además, añaden que tienen una alta proporción de alumnos con necesidades especiales, un sector que por sus características «necesita espacio y apoyos», por lo que insisten en la necesidad de un nuevo IES para la ciudad. 

En esta línea, el sindicato CGT también critica los problemas que soportan los dos institutos públicos y demandó una solución, porque «sin instalaciones adecuadas no hay educación de calidad», afirmaron.