El Ayuntamiento de Villagonzalo Pedernales ha aprovechado el proyecto de remodelación del parque de Las Cuevas para ofrecer a los vecinos de su entorno 18 nuevas plazas de aparcamiento. «Era una necesidad y una petición de los residentes de esta zona y ahora la vamos a dar respuesta», explica Purificación Ortega, alcaldesa de la localidad. En concreto, van a ofrecer la posibilidad de estacionar en batería a casi una veintena de vehículos en el lateral de la calle Las Cuevas. «No vamos a restar metros al parque, sino que es como una continuidad del mismo, se va a utilizar superficie de la acera actual y el suelo de la zona de aparcamiento será de pavicésped», detalla la regidora, contenta de poder ejecutar por fin una iniciativa tras la que llevan varios años. 

El inicio de las obras con las que se modificará íntegramente este lugar de esparcimiento al aire libre próximo al colegio se prevé en breve, espera Ortega, que afirma que el concurso despertó el interés de siete empresas y que finalmente se adjudicó a Hidrycon Burgos. «Espero que para el verano estén concluidas, porque el plazo de ejecución es de tres meses», relata. 

La imagen del parque, actualmente obsoleto, cambiará por completo. Desaparecerán los caminitos de piedras que recorren sus 6.000 metros cuadrados de superficie y todo ello pasará a estar a la misma altura, sin ningún cambio de nivel, aunque habrá dos zonas delimitadas como de paseo también con pavicésped. Contará con una amplia zona verde con arbolado, en la que se respetarán la mayoría de los ejemplares actuales, «solo se cortarán los que están secos», afirma, y se crearán otros tres espacios muy bien diferenciados y que darán respuesta a las diferentes necesidades que presentan los vecinos de Villagonzalo por edades o gustos. 

En la parte más cercana al aparcamiento se instalarán elementos que conformarán un gimnasio al aire libre, con una pequeña pista circular sobre la que se podrá correr saltando unos obstáculos colocados en ella. En el centro habrá un amplio parque con suelo de arena, donde los más pequeños dispondrán de diferentes módulos de juegos y columpios, además de dos amplias pirámides de cuerdas para escalar. También pensando en el público más infantil se colocarán dos camas elásticas incrustadas en el suelo para que puedan saltar. 

El conjunto se completa con una pista de pump truck, para recorrer con bicicletas o patinetes en un trazado que presenta diversas curvas y desniveles. Igualmente, unos bancos con forma semicircular se colocarán en frente de la zona de juegos infantiles. También se construirá una fuente más actual y práctica donde se encuentra la existente. A la hora de diseñar todo el conjunto se ha tenido en cuenta su funcionalidad y, especialmente, que su mantenimiento sea lo más sencillo posible. 

Nueva calle. También en breve se va a asfaltar una nueva calle, a la que en el último pleno del año pasado decidieron darle el nombre de La Casilla en relación al inmueble que había en ella antes y donde vivía el guarda. Antiguamente propiedad de Renfe, ahora el consistorio va a invertir 106.000 euros para asfaltar 500 metros de calle y también va a vallar la parte que delimita con las vías del tren, por las que pasa ocasionalmente un convoy de mercancías. Este nuevo vial dará servicio a los futuros habitantes de una promoción de 38 viviendas pareadas que se van a construir en esta zona. 

Hay otras obras ya finalizadas en la localidad, como la del parque de la báscula, en la que se han invertido alrededor de 50.000 euros para adecentar esta parte que supone el acceso al municipio. Allí se ha construido un pequeño muro de piedra y se han plantado árboles y otras especies para crear una coqueta zona ajardinada. «También se van a decorar las paredes de la báscula con diferentes dibujos para que quede más bonito todo el conjunto», afirma. 

Otros proyectos importantes en marcha es el de dotar de luz al polígono industrial, que supondrá una inversión de más de 500.000 euros y el de la instalación de contadores de agua inteligentes, que rondará los 150.000 euros.