Por un Cristo más popular

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El arzobispo, Francisco Gil Hellín, subraya que la posibilidad de sacar la réplica del Cristo de Burgos en las procesiones «acercará a las nuevas generaciones a un tesoro» del que hay que sentir «orgullo»

El cristo de burgos - Foto: Ángel Ayala

Desde su llegada a Burgos desde Flandes jamás el Santo Cristo de Burgos ha salido en procesión. Quienes lo han venerado lo han hecho en la Catedral -en la capilla que lleva su nombre- y con anterioridad a su llegada a la Seo (1836), en el antiguo monasterio de San Agustín. La réplica que encargó el Cabildo y que ha ejecutado Talleres de Arte Granda, de Alcalá de Henares, sí podrá ser admirada en las calles esta Semana Santa. El Viernes Santo es su gran día, primero con el ‘Descendimiento’, a las 13 horas, y después con la procesión del Santo Entierro, a las 20,30. Esta copia «hará posible que el Cristo de Burgos sea contemplado de forma más popular», señaló el arzobispo, Francisco Gil Hellín, durante su presentación. Y permitirá que «las nuevas generaciones se acerquen a un tesoro que todo el mundo conocía pero que no había sido objeto de un acercamiento personal que debe llenar de orgullo».

Pese a que la Hermandad del Santísimo Cristo es la que más se ha movido para llevar a cabo la réplica, en estos momentos no cuenta con suficientes cofrades para levantar en volandas el Viernes Santo por las calles de al ciudad los 720 kilos que pesa la imagen y su soporte. Serán 36 porteadores de la Cofradía de las Siete Palabras (parroquia de San Fernando) quienes lo hagan.

En el acto de ayer en la Catedral participaron el presidente del Cabildo, Juan Álvarez Quevedo; el abad de la Hermandad del Santísimo Cristo, Alejandro Millán, y la directora de restauración del taller Granda, Francisca Soto. Según explicó, para elaborar la réplica utilizaron las nuevas tecnológicas -escaneado de imagen, radiografías, etc- con las técnicas tradicionales, como la talla en madera de las diferentes partes del cuerpo. Después efectuaron el ensamblaje metálico de las articulaciones, rellenas éstas de fibra y forradas de cuero, logrando la misma movilidad que la talla original. Se ha completado con pergamino encolado y barbotina de cuero. La inversión superó los 100.000 euros.