La delegada del Gobierno, Virginia Barcones, destacó hoy la ciberdelincuencia como uno de los retos que afronta la Guardia Civil, para una práctica que en la actualidad ya supone el 25 por ciento de los delitos denunciados en Castilla y León.

Se trata, dijo, de una modalidad delictiva propiciada por las nuevas formas de relacionarse y de comprar para cuyo combate la Benemérita "se ha preparado y con un índice de esclarecimientos de ciberdelitos que, pese a su complejidad, va avanzando, que sigue creciendo y es un reto que tenemos por delante, sin olvidar la custodia del patrimonio, de las personas o de los colectivos más vulnerables, entre otros".

Así lo manifestó durante la celebración hoy en la capital leonesa del acto del 179 aniversario de la Guardia Civil, presidido por el general de Brigada Jefe de la 12 Zona, Luis del Castillo Ruano, con la asistencia de la autoridades civiles, religiosas y militares, acompañados de representantes de diversos ámbitos de la sociedad y de familiares y amigos de los agentes.

Virginia Barcones también recordó que Castilla y León es una de las autonomías más seguras de España, con una tasa de criminalidad de 36,7 infracciones penales por cada mil habitantes, lo que la sitúa 12 puntos por debajo de la media de España, que a su vez es uno de los países más seguros de Europa.

En su intervención, elogió el papel de la Guardia Civil de la que destacó que supone un "eje vertebrador vital y remarcó su labor "incansable e inconformista". "No cejéis en vuestro empeño ante los nuevos desafíos de la sociedad", dijo a los presentes.

Por su parte, Luis del Castillo Ruano incidió en la ejemplaridad que deben ejercer los miembros de la Guardia Civil y reprobó posibles situaciones y conductas que pueden "apartar" a sus protagonistas de la "hermandad" de la Benemérita. "El honor que se gana en décadas se puede perder en un instante", remarcó.

También dijo, en un acto que incluyó una parada militar, desfile, homenaje a los caídos y entrega de reconocimientos y distinciones, que en ocasiones se achaca a la Guardia Civil una "resistencia al cambio" que, dijo, nada tiene que ver con su realidad actual, porque "siempre está dispuesta a adaptarse a los cambios que la sociedad demanda".