Valores por encima de títulos

EFE
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El técnico del Magdeburgo, Wiegert, quiso dar el trofeo de la Champions al Kielce, que ganaba cuando el partido se detuvo para atender una emergencia sanitaria en la grada. Dujshebaev lo rechazó y votó por dejar desierta una final que luego perdió

El entrenador del Magdeburgo, Bennet Wiegert, celebra el título de campeón de la Champions. - Foto: RONALD WITTEK

Pocas veces se pueden apreciar en el deporte valores que dan lecciones de vida, pero por suerte, siempre queda un hueco para el máximo 'fair play' en el balonmano. La final de Champions, que se disputaba en Colonia, enfrentaba al Kielce y al Magdeburgo cuando a falta de 12 minutos para el final el partido tuvo que detenerse para atender al periodista polaco Pawel Kotwica, que lamentablemente falleció. Esos minutos de confusión e indecisión sobre la pista llevaron al entrenador del conjunto alemán, Bennet Wiegert, a proponer dar por concluida la final y otorgar la victoria el equipo polaco que era quien mandaba en el marcador en ese momento.

Una suspensión con la que estuvo de acuerdo el técnico del Kielce, el español Talant Dujshebaev, que, sin embargo, no aceptó la victoria y propuso que la final se cerrase "sin ningún ganador".

"Bennet Wiegert se acercó a Talant Dujshebaev y le propuso dar por finalizado el encuentro con el resultado que figuraba en ese momento en el marcador", explicó el director de mercadotecnia del club polaco, Pawel Papaj.

El técnico español del Kielce, Talant Dujshebaev.El técnico español del Kielce, Talant Dujshebaev. - Foto: RONALD WITTEKUna propuesta que hubiera otorgado el título al Kielce, que finalmente acabó perdiendo (30-29) la final en la prórroga y que en ese momento, a falta de 12 minutos para la conclusión, contaba con una ventaja de dos goles (20-22).

"Estoy de acuerdo contigo, bravo, pero no reconocemos la victoria, el encuentro termina con dos equipos finalistas, sin ningún ganador", respondió Dujshebaev al preparador germano, según desveló este lunes el directivo del club polaco a través de las redes sociales.

Finalmente y tras más de un cuarto de hora de interrupción, la final se reanudó, una vez evacuado a un centro hospitalario el periodista, que tuvo que ser atendido en la tribuna de prensa del Lanxess Arena tras perder el conocimiento.

"Nos enteramos oficialmente de su muerte unos veinte minutos después del final del partido", dijo Papaj, que, como todos los integrantes del Kielce, se mostró consternado por el fallecimiento del informador polaco.