«Cuando el fin es lograr acuerdos para Aranda, el sacrificio merece la pena»

N.L.V. / Aranda
-

Alfonso Sanz • Concejal de CCD en el Ayuntamiento de Aranda de Duero

Alfonso Sanz, concejal de CCD en el Ayuntamiento de Aranda de Duero. - Foto: DB

Presume este arandino, que nació en plena Plaza Mayor en 1958, casado y padre de dos hijos, de que lo único que le mueve en la política es su interés por lograr soluciones para los problemas de ‘su pueblo’. Más de uno pensaba que, tras su enfrentamiento con la cúpula comarcal del PP que desembocó en su expulsión del partido hace casi dos años, su vida en la esfera pública estaba acabada. Sin embargo, tras lograr su acta de concejal bajo las siglas de CCD, ahora se ha convertido en pieza fundamental del equipo de gobierno estable del Consistorio arandino.

Se ha convertido en el hombre del momento ya que al integrarse en el pacto de gobierno tripartito, ha otorgado al equipo de gobierno del PP la estabilidad a la que aspiraba desde junio.

¿Qué ha cambiado para conseguir en este momento un pacto que no se logró hace meses?

La actitud de todo el mundo, que ha entendido que por los derroteros que íbamos no se pueden solucionar los problemas que atraviesa Aranda. Y la postura de CCD ha sido siempre clara, solucionar los problemas de Aranda.

¿Era insostenible mantener la parálisis municipal que había?

Sí, porque cada vez iba a más. Y cuando vives la situación interna del Ayuntamiento te das cuenta de que no hay alternativas al equipo de gobierno actual y las únicas perspectivas pasan por lo que hay. La opción está clara, bloquear el Ayuntamiento o buscar soluciones, y en lo segundo es en lo que se posiciona CCD.

¿Cree que los ciudadanos han entendido el pacto?

Imagino que habrá posturas para todos, pero creo que sí. Entre los votantes de CCD y la gente de la calle, lo que se busca son soluciones, en base al programa con el que nos presentábamos y colaborando desde dentro. Una postura que no cerramos a nadie, sino que invitamos a que se integren otros o, al menos, que sus alternativas sean contempladas.

¿Y los votos de descontentos del PP que recogió en mayo y que ahora ven cómo los pone al servicio de su gobierno?

Estamos dando por hecho que fue así. Supongo que estarán contentos porque estamos más personas bajo su postura. Pero tampoco tiene por qué ser así. Las elecciones son en un momento, luego hay que dar tiempo para ver qué ha pasado y esperar al desarrollo de los acontecimientos para saber si la gente ha respondido. En este caso, como concejal hay que tener en cuenta que estás al servicio de todos los ciudadanos, no solo de los que te han votado, aunque tienes que ser fiel a tu programa, y que somos uno de 21.

Su decisión no ha sido entendida por todos los integrantes de su formación...

Tampoco es así. Tuvimos unas reuniones y la mayoría me dio su confianza y los que estaban en contra, el beneficio de la duda, confiando en que el trabajo se desarrolle correctamente. Es arriesgado, porque somos uno dentro de 11 y el peso que se pueda tener es limitado, pero CCD no se presentó a las elecciones para estar en contra de todo. La otra opción era ser una oposición constructiva con propuestas concretas. Hemos elegido la opción más arriesgada, la más difícil, la que más nos implica, estar trabajando más horas, más tiempo y a lo mejor más ingratas. Pero para eso nos presentamos a las elecciones.

La anterior experiencia tripartita en Aranda no fue positiva, ¿por qué esta vez funcionará?

Primero, porque está abierto a otros grupos, va a haber diálogo y acuerdos con otras fuerzas. También, porque no existe alternativa de gobierno. Destaco también la sintonía con PCAL y PP, con lo que se puede lograr acuerdos más fácilmente. Y los problemas de índole personal que podía haber al principio, el tiempo ha sido el suficiente para pasar página y centrarnos solo en lo que nos interesa, el futuro. El problema de aquel tripartito que no funcionó es que se siguen pagando las consecuencias y dos de las formaciones, aún en el Consistorio, no se entienden y es imposible la alternativa de gobierno.

¿Cuáles han sido los principales logros en las negociaciones del acuerdo?, ¿y a qué ha tenido que renunciar?

Cuando uno se sienta a negociar se tiene que olvidar de sus pretensiones. Hemos conseguido logros en este inicio de legislatura, como el PGOU, con el que se ha cumplido lo que propusimos los no adscritos del anterior mandato. Igual con la plaza de toros. En el acuerdo viene claramente el programa de CCD. ¿Renuncias? Sobre todo posicionarse en un sitio olvidándose de los problemas personales e intentar llegar a acuerdos cuando era más sencillo estar en la oposición. Hablar es complicado, pero cuando la meta es lograr acuerdos por Aranda, el sacrificio merece la pena.

¿Por qué condicionar el arranque del pacto a una solución global a la plaza de toros? ¿No hay problemas más importantes en Aranda de Duero?

Precisamente, por eso, para dar cancha a que los temas más importantes no sean solo la plaza de toros. Hemos querido dejarlo reflejado para centrarnos en lo demás. Parece que no hay más cosas que hacer, y eso es falso. Hay mucha gente a la que le interesa, pero la mayoría lo que quiere es que se solucione y nos centremos en otros temas. Lo menos importante es lo que más tiempo nos lleva por eso queremos solucionarlo al entrar. Hemos perdido muchísimos años.

En su programa electoral apostaban por una solución inmediata a este asunto, pero también por la exigencia del cumplimiento íntegro del contrato y reclamación de daños y perjuicios ¿dónde quedarán ahora esas pretensiones?

Seguimos diciendo exactamente lo mismo. La solución la tenemos que buscar haciendo cumplir con los informes.

¿Por qué ese empeño por auditar todo el procedimiento? ¿Dónde queda el mandato legal que establece que solo los tribunales pueden controlar los actos administrativos?

Aquí no buscamos cazas de brujas ni las vueltas a nadie. El compromiso es que se hiciera una auditoría para que la gente sepa lo que ha pasado, si ha habido errores, dónde se han cometido y que estemos tranquilos. Con ese planteamiento estamos todos de acuerdo. No pedimos responsabilidades.

En cualquier caso, la prioridad debe ser aprobar unos presupuestos ¿para cuándo?

Llevamos desde 2006 sin presupuestos y eso no beneficia a nadie. No puede ser. Todos los años, en diciembre o enero, tienen que presentarse y aprobarse. Es una prioridad.

¿Y se logrará un acuerdo para que la plantilla no suponga la nulidad del presupuesto?

La responsabilidad tiene que ser de todos, políticos y sindicatos. Vamos a poner medios, el diálogo, para aprobar ambos.

¿Dónde quedan asuntos contemplados en el programa de CCD, como la creación de la figura del oficial urbanista, la oficina de control y seguimiento presupuestario, el proyecto de Aranda Ciudad de los Parques y de la Música o el Plan de Instalaciones Deportivas?

En la mayoría coincidimos con PP y PCAL, por lo que no va a haber problemas. En otros, será más difícil llegar a acuerdos, pero seguiremos reivindicando nuestro programa. Aunque reitero, somos un concejal de 21.

¿Por qué entrar a gobernar con responsabilidades con tan poco peso como Turismo y Comercio?

Por mí, no hubiera cogido ninguna, pero hemos visto la experiencia de PCAL y también se nos podría criticar. En CCD no nos quitamos de asumir responsabilidades, pero no queremos que se nos diga que queremos a cambio de. Al revés. Se nos está dando más trabajo, más esfuerzo, más responsabilidad, pero no a cambio de nada, sino por convencimiento

¿Son un paso intermedio a asumir en unos meses todo Promoción y Desarrollo?

No hay que correr. La disposición de CCD era entrar a formar parte y solucionar problemas. Sin ninguna condición. No queríamos prebendas, distinciones ni puestos. Eso se ha repetido en los últimos días.

Hubo empeño en que asumiera también Deportes, ¿su negativa es definitiva?

Nunca se puede decir de este agua no beberé. Lo primero es empezar a andar y luego ver cómo funciona el tripartito. Si es correcto, no habrá que cambiar nada y si no, la alcaldesa es la que tiene que organizar y dar funcionalidad a todos los concejales.

¿Cómo ve trabajar ahora codo con codo con personas que hace apenas unos meses promovieron su expediente de expulsión del PP?

Es mezclar las cosas. Siempre he dicho que no soy político. Solo soy concejal del pueblo donde he nacido, quiero solucionar sus problemas y no tengo ninguna traba en decir algo que me parezca incorrecto. Es lo que hice y lo volvería hacer. En ese camino no me para nadie. Es un tema olvidado y en este mundo hay que mirar hacia adelante. También puedo decir que gracias a eso he conocido a gente fenomenal con la que estoy trabajando.

Hay mucha gente que apunta a que en el trasfondo del pacto existe un compromiso de reingreso en el PP. ¿Deja abierta la puerta a volver a militar en sus filas en un futuro?

Nunca volveré a militar en ningún partido político.

¿Tenemos que concederles los 100 días de cortesía de todo nuevo equipo de gobierno?

No, pero sí dejarnos firmar el pacto y entrar a gobernar. Ahora mismo no hay más que un preacuerdo condicionado que hasta que no se formalice, sigo estando en la oposición.