Un gol de Willian José, en el último minuto del tiempo de prolongación, dio la victoria al Betis en El Madrigal por 1-2, tras un trepidante encuentro con numerosas ocasiones de gol en ambas áreas, en el que cualquiera de los dos equipos pudo ganar.
Llegaban ambos equipos a este debut liguero con muchas dudas tras una mala pretemporada y sin embargo ofrecieron un gran partido. El Betis, con un bloque de presión alta, recuperó varios balones peligrosos aunque no fue capaz de poner en apuros al Villarreal, que tuvo en Álex Baena a su hombre más incisivo, que al cuarto de hora marcaba un golazo de volea desde el punto de penalti, que era anulado por un fuera de juego milimétrico.
Pellegrini apostó de salida por Isco Alarcón, pese a que el centrocampista llevaba nueve meses sin competir en un partido oficial, y no defraudó el malagueño, quien se mostró muy participativo y con su movilidad y último pase fue decisivo para su nuevo equipo.
Con el paso de los minutos, el Betis cobró mayor protagonismo en el juego y explotó la sociedad que por la banda derecha crearon Sabaly y Luiz Henrique. Avisaron a los 18 minutos en una buena combinación entre ambos que no acertó a rematar un desdibujado Borja Iglesias en el primer palo, y casi a continuación fue Isco el que habilitó al espacio al brasileño, que recortó de tacón en la línea de fondo y cedió al punto de penalti donde Ayoze definió con un colocado disparo raso para subir el 0-1.
Con Isco a los mandos, el Betis buscó ampliar su renta. Pudo conseguirlo en una jugada ensayada que marcó Guido Rodríguez y fue anulada por fuera de juego, y posteriormente tras una gran asistencia del malagueño a Ayoze, cuyo disparo picado logró desviar con la manopla Jorgensen.
Sin embargo, la última del primer acto fue para el Villarreal tras un remate de cabeza de Gerard que obligó a lucirse al meta Rui Silva, para permitir a su equipo marcharse al descanso con ventaja.
En la reanudación, el cuadro local se mostró más ambicioso aunque encontró una mina en las jugadas a balón parado. Avisó Foyth con un remate al palo, cuyo rechace no supo aprovechar Sorloth, y poco después fue el otro central, Jorge Cuenca, que con cabezazo majestuoso empató el partido.
Los cambios de Pellegrini lograron equilibrar un partido que se convirtió en un toma y daca, con llegadas de unos y otros, aunque fue el Betis el que más peligro generó en los instantes finales y en el último minuto de la prolongación, un mal saque de puerta de Jorgensen, acompañado por una mala acción defensiva del Villarreal, lo aprovechó Willian José para anotar el definitivo 1-2.