Si hay una enfermedad que es especialmente mortífera para la mujer esa es el ictus, una dolencia que es la principal causa de fallecimiento para más de 16.000 españolas al año, más del doble que las que fallecen por cáncer de mama, si bien el 90 por ciento de los casos pueden ser evitables, afirman los expertos a una semana de la celebración del Día Mundial de esta enfermedad.

Para sensibilizar y concienciar en la prevención, detección y la necesidad de actuar a tiempo, la asociación Freno al Ictus inició ayer la campaña Ictus y Mujer, que cuenta con el apoyo del Instituto de la Mujer, la Dirección General de Salud Pública y con el aval de la Sociedad Española de Neurología.

Una dieta sana y equilibrada, combatir el sedentarismo, eliminar el tabaco y las drogas y reducir el consumo de alcohol, así como tomar la vida con calma son algunas de las pautas que se pueden seguir para evitar el ictus.

Se trata de una enfermedad que se produce por la obstrucción del flujo sanguíneo de una arteria, lo que origina una disminución del riego sanguíneo en el cerebro provocando un daño neuronal.

Durante la presentación de la campaña, la directora del Instituto de la Mujer, Silvia Buabent, calificó este problema del «gran desconocido», a pesar de que cada año afecta a unas 120.000 personas en España, uno de cada cinco va a sufrir un ictus a lo largo de su vida y en el 50 por ciento de los casos produce discapacidad.

En la importancia de actuar a tiempo para evitar la mortalidad y las secuelas puso el acento el presidente de Freno al Ictus, Julio Agredano, quien insistió en que hay que llamar inmediatamente al 112 al detectar los síntomas. «Al hospital no se va, te llevan», indicó.