La actividad presencial ha recuperado protagonismo en todos los centros de salud de la provincia a lo largo del año y, de hecho, el 59,9% de las consultas médicas ya se desarrollan cara a cara, según datos oficiales de la Consejería de Sanidad relativos a noviembre. Este es el último mes con cifras cerradas y evidencia el incremento de la presencialidad, pero, sin embargo, no lo suficiente como para alcanzar el objetivo fijado por la Gerencia Regional de Salud (Sacyl): que ocho de cada diez citas médicas (un 80%) se desarrollaran frente a frente el pasado verano.
Seis meses después, solo hay un centro de salud en la provincia que cumple e, incluso, supera el límite establecido: el de Aranda Rural, que atiende a los residentes en la comarca de la capital ribereña y, siempre según información oficial, ya ha recuperado la normalidad, con algo más del 90% de presencialidad. Si se atiende únicamente a la capital, el que mejores resultados registró en noviembre fue el de La Antigua, con algo más del 71% de sus pacientes atendidos con contacto físico, siempre según información oficial (ver desglose de toda la provincia en el despiece adjunto en la otra página).
De los 37 ambulatorios de la provincia, el Aranda Rural es el único en el que se ha retomado la dinámica de trabajo habitual hasta el comienzo de la pandemia por el coronavirus SARS-CoV-2. Y sorprende porque, si bien es cierto que no es el más grande (tiene 45 consultorios locales a su cargo y un cupo de 7.800 pacientes, que son la mitad de los que asumen el Aranda Sur, el García Lorca o el de Santa Clara), también lo es que hay otros con muchas menos tarjetas sanitarias adscritas y un porcentaje de presencialidad en los despachos facultativos llamativo por lo bajo.
Es el caso del centro de salud de Pampliega, donde, según cifras de la Consejería de Sanidad, todavía se pasan más consultas por vía telemática que cara a cara. En concreto, la estadística oficial refleja que el porcentaje de citas que se resuelven con una llamada de teléfono o algo similar fue del 52,7%. Es decir, que menos de la mitad de las visitas médicas conllevan contacto físico entre facultativo y paciente (el 47,3%). Los datos relativos a este ambulatorio rural llaman la atención porque, con 24 consultorios y 1.869 pacientes a su cargo, tiene un volumen de actividad muy inferior a otros de la provincia que, sin embargo, llegan al final de año con mayor porcentaje de presencialidad. Y tampoco en plantilla es el que peor situación vive, al menos sobre el papel, donde figura que tiene 4 médicos.
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