El incesante calor de estos últimos días, que ya no cesa ni por las noches, motiva el 'plan sombra' que propone Vox para mejorar la calidad de vida de los vecinos y visitantes de Burgos. Raúl Martínez, concejal de Comercio, plantea instalar toldos en varias calles de la capital para proteger del sol y dotar a los barrios de más espacios de sombra durante los meses de verano.

Martínez propone un sistema de entoldamiento a la altura de las cornisas de los edificios para mitigar los efectos del calor y que el aire corra. El concejal considera que lo mejor sería empezar por calles con necesidad urgente, como Sombrerería, La Paloma, Laín Calvo, San Juan, parte de la Plaza del Rey San Fernando o la Plaza Mayor y, posteriormente, estudiar otras zonas de la ciudad donde resulte beneficiosa esta medida de hacer sombra.

"El sol convierte las calles sin árboles de Burgos en un desierto urbano", expresa Raúl Martínez, que defiende que "esta actuación funciona ya desde hace tiempo en muchas ciudades y se trata de una medida de éxito, barata, fácil y muy eficaz".

Las evaluaciones térmicas de áreas urbanas de las calles mediante secuencias de termografía, explican fuentes de Vox, muestran cómo los toldos pueden rebajar hasta 14 grados en el pavimento y 6 grados en las fachadas. "El 'plan sombra' llega por primera vez para dar calidad a la ciudad, a los comerciantes, turistas, visitantes y burgaleses", declara el concejal de Vox, que planteará la iniciativa para que se haga efectiva lo antes posible.