Los sindicatos CCOO y UGT calculan que entre 800 y 1.300 temporeros se desplazarán hasta la Ribera del Duero para la campaña de vendimia que está a punto de arrancar. Sus secretarios provinciales, Juan Núñez y Pablo Dionisio, estiman que en torno al 95-96% llegarán a la comarca con sus correspondientes contratos, no así el 4% restante que todavía hoy arrastra condiciones precarias en cuanto a salarios, alojamiento o transporte. 

Así lo han indicado en una rueda de prensa tras la reunión mantenida en Aranda de Duero con los distintos agentes sociales implicados, desde bodegueros, a Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y representantes institucionales de Diputación de Burgos, Junta de Castilla y León y Subdelegación del Gobierno en Burgos, para analizar la situación de los temporeros de cara a la vendimia tanto en la Ribera del Duero como en Arlanza. 

"No se puede tener a los temporeros sin alojamiento ni de malas formas. Hay que intentar mejorar las condiciones de trabajo. Hemos mejorado en cuanto a contratación, pero todavía hay carencias", advirtió Dionisio, reconociendo que la reunión fue "un poco tensa".

Núñez, por su parte, abobó por atajar hasta el más mínimo caso de marginalidad porque "aunque seguramente sean una minoría, va en detrimento de la marca Ribera del Duero, de la tierra y del esfuerzo de todos los trabajadores". 

Ambos reclamaron que se convoque la mesa de diálogo social para acordar una serie de medidas respecto a los temporeros.