Después de un año, el actual, sin que se hayan producido nuevas aperturas en el sector hotelero de la ciudad, 2015 romperá esa tendencia con la puesta en funcionamiento de un nuevo proyecto empresarial que viene de la mano del Grupo Alfredo Marijuán. Estará ubicado en el entorno del Museo de la Evolución Humana, tendrá tres estrellas, contará con 25 habitaciones, más una cafetería abierta al público, y dará empleo a siete u ocho trabajadores.
Situado en la calle Ramón y Cajal, junto al colegio Círculo Católico, el futuro establecimiento era propiedad de las hermanas Trinitarias, que en su día pensaron convertir el edificio en una hospedería. Sin embargo, la idea no cuajó y ahora es este grupo el que ha comprado el inmueble para darle un uso hostelero, ampliando así un negocio en el cuenta con otros dos hoteles: el Vía Gótica, en la plaza Vega, y el Camino de Santiago, en Castrillo del Val.
Precisamente y por su ubicación, en el centro de la capital, el nuevo alojamiento será la continuación del Vía Gótica, compartiendo la misma línea de diseño de hotel-boutique. Por ello, será también la aparejadora e interiorista Nuria Marañón la que se encargue del proyecto de reforma del edificio y de la decoración.
La directora comercial del grupo, Carolina Alonso, explica que la adecuación consistirá en la remodelación de toda la planta baja, donde irá la cafetería, mientras que la actuación en la planta superior se centrará principalmente en la decoración. Por el momento, prefiere no desvelar el montante total de la inversión, aunque afirma que será «importante».
La empresa está a la espera de recibir los permisos del Ayuntamiento para comenzar las obras, trámites que inició hace un mes y de que cuya evolución dependerá su inicio. No obstante, Alonso confía en que la burocracia no ralentice el proyecto y los trabajos puedan arrancar cuanto antes para que el establecimiento abra sus puertas la próxima Semana Santa.
La decisión del grupo de embarcarse en una nueva aventura empresarial obedece a la «buena respuesta» que ha tenido el Vía Gótica, que comenzó a funcionar en marzo de 2011, tanto como hotel como cafetería. De hecho, Alonso asegura que este hotel «se ha quedado pequeño» y que se han tenido que desviar clientes a otros establecimientos, lo que supone una «pérdida» a la que ahora se quiere dar un respuesta con este segundo alojamiento en el centro de la capital burgalesa.
Aunque aún no está decidido el nombre, algo que está llevando más tiempo de lo esperado, el nuevo hotel contará con una plantilla de 7 u 8 trabajadores, que se sumarán a los 20 que actualmente trabajan en el grupo, si bien esta cifra varía dependiendo de la temporada. De igual forma, las 25 habitaciones previstas incrementarán la oferta de la empresa, formada actualmente por 16 en la plaza Vega y 40 en Castrillo del Val.
La directora comercial del grupo agrega que antes de decirse por el edificio de las hermanas Trinitarias se han barajado otras localizaciones, entre las que se encontraba el Conde Miranda, que será convertido en albergue juvenil, aunque, finalmente, ha pesado la oferta de la plaza Santa Teresa.