Tras 4 años muy difíciles, con pérdidas en su cuenta de resultados y en los que se vio obligada a destruir empleos, Sinterpack vuelve a presentar beneficios. Su director general, Sergio Pelegry, prevé que el volumen de ventas alcance los 7 millones al finalizar este ejercicio, que en 2018 se vaya hasta los 10 y que en 2019 llegue a los 15. Es decir, confía en duplicar los números en apenas 2 años.