El periférico barrio mirandés de Bardauri calienta motores para celebrar sus tradicionales fiestas durante este fin de semana, sin embargo, lo hace a medio gas. La percepción de que Miranda no cuenta con suficiente Policía Local en las calles y el miedo a los actos vandálicos que ocasionalmente se suceden por la ciudad ha generado un clima algo tenso. Así lo confirman desde la Asociación de Vecinos, donde reconocen que encaran los actos con «nervios» y cierta preocupación. Ya en años anteriores sufrieron los males habituales de los botellones, como la suciedad acumulada, pero en esta edición el riesgo les parece mayor.
El desencadenante principal para que en la Asociación de Vecinos de Bardauri haya ese nerviosismo se encuentra en los graves actos vandálicos que registró ElCrucero hace apenas una semana. Durante las fiestas de este barrio unos jóvenes forzaron las puertas de un autobús, robaron los martillos y reventaron casi todas las lunas laterales.Además, también anegaron los parques con botellas rotas y hasta prendieron fuego a un contenedor de papel que estaba separado por unos pocos metros de una vivienda. Ante estos hechos, los residentes de la zona que ahora inicia sus celebraciones han acordado«guardar los coches bajo techo por las noches» para evitar que los desalmados carguen contra las propiedades privadas.
También trataron de contactar con elAyuntamiento hace varios días para solicitar que hubiera presencia policial en las calles, bien fuera del cuerpo local o nacional, durante las noches festivas. Desde la asociación explican que presentaron un«escrito» con esta petición, pero solo han recibido una respuesta: el silencio. Al menos, hasta ayer seguían aguardando una contestación real por parte del departamento de Seguridad Ciudadana.
Precisamente, el concejal responsable de este área, PabloGómez, explicaba ayer a este periódico que todavía no podía ni tan siquiera «asegurar» si la Policía Local iba a contar con patrullas. El edil insiste en que la causa por la cual la plantilla está mermada son «las bajas», pues comenta que hay hasta 16 agentes de 41 con plenas funciones que se encuentran fuera de l servicio por este motivo. Ahora bien, al mismo tiempo aclara que hasta el momento las fiestas de Bardauri tampoco han registrado un gran «peligro» en sus diferentes ediciones.
En cualquier caso, lo cierto es que durante esta misma semana ha habido varios días, y noches, en las que el Ayuntamiento no disponía de agentes suficientes como para desplazarse a los avisos y, ni mucho menos, para dejar una vigilancia fija. Es más, en el último parte oficial de la Policía Local de Miranda, que se refiere al miércoles 12, ha quedado constancia de que en el turno nocturno no había ninguna patrulla disponible. A lo largo de esas horas se registraron solo dos llamadas, una de ellas por las molestias de un perro que ladraba en la calle República Argentina y la otra por un vecino delCasco Viejo que se quejaba de «música elevada».
Con todo ello, la tensión generada resulta ciertamente frustrante para los vecinos de Bardauri, ya que en la asociación comentan que el barrio se «ha implicado mucho» este año para organizar las fiestas.Según dicen, en 2022 acababan de «aterrizar», pero ahora ya cuentan con cierto bagaje y han apostado por un sinfín de actividades con la colaboración, incluso, de personas que no viven allí.
El programa se extiende hasta el martes, cuando la procesión, la misa y un picoteo cerrarán los actos a partir de las 19:00 horas. Antes de ese día, desde hoy a las 18:00, habrá eventos casi constantes. Se podrá disfrutar de una marcha ciclista, conciertos, torneos de juegos de mesa, hinchables y parque infantil acuático, entre otras cosas.