Mediado el mes de junio, en su doce jornada, se ponía en circulación un sello de Correos de 0,85 euros dedicado a los Pendones de León. Impreso en huecograbado aparece con un formato superior al habitual con unas medidas de 57,6 x 40,9 mm. y una tirada de 300.000 unidades. En el efecto para el franqueo y colección se puede ver a cuatro pendones a merced del viento, erigidos sobre pesados mástiles a la manera más medieval que se recuerda.
Las enseñas del antiguo reino leonés gozan de una más que centenaria tradición unida a la identidad de su pueblo. De origen militar estos estandartes identificaban a su paso y desde la lejanía la enseña que distinguía a los señores feudales y sus tropas. En el medievo no existían ejércitos organizados. Eran los reyes y los nobles los que unían en torno a su persona a los hombres de confianza, que bien armados formaban las mesnadas llamadas a guerrear.
El colorido en los pendones leoneses es una constante que acrecienta su peculiaridad, y de los catalogados los hay que podían medir su mástil más de 10 metros de altura, con ricas telas dando al conjunto un peso de hasta 35 kilos. La aparición de este sello coincidía en el tiempo con la celebración de la XIII Exposición de Filatelia Cuenca del Duero, en Benavides de Órbigo. Después de varias ediciones volvía a organizarse en tierras leonesas.
La Sociedad Filatélica Reino de León, organizadora de la muestra, en la que competían coleccionistas de Castilla y León con los del norte de Portugal pudieron ver de cerca la enseña de Benavides protagonista de un interesante historial por centurias. En el palmarés final los artículos aquí publicados fueron premiados por el jurado. En la reunión de Benavides de Órbigo han optado a premio 27 colecciones, en su mayoría de historia postal, 14 de la región y 13 de Portugal.
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