Está convencido de que este domingo ganará las elecciones. Pero no esconde que necesita captar voto del centro porque el resultado de 2019 es muy difícil que le sirva para retener la Alcaldía. De ahí que sus guiños vayan hacia ese electorado y que, para persuadirle, asegure que  no quiere que Podemos (ni ningún otro partido) entre en su futuro Gobierno. Asume algunos errores en su mandato, busca con descaro el apoyo de Gamonal, donde el PSOE tiene su gran bastión, y se defiende del PP asegurando que él, antes de sanchista es socialista.

En los últimos meses usted ha repetido en numerosas ocasiones que el PSOE ha ganado en Burgos las seis últimas elecciones. ¿No lograr la victoria sería en un fracaso?
Sí, totalmente. Es más, tengo tanta confianza que estoy dispuesto a acordar con la señora Ayala eso que viene diciendo con la boca pequeña de facilitar el Gobierno a la lista más votada si no gana las elecciones.

¿Firmaría ese compromiso?
Sí, incluso este sábado. Lo que pasa es que últimamente la veo dudar. Como que no dependa de ella. Me gustaría saber hasta qué punto pude decidir en su partido. Porque si está lanzando un globo sonda y luego no va a tener capacidad de poder suscribir un acuerdo...

Daniel de la Rosa quiere repetir victoria y pretende evitar cualquier coalición para gobernar. - Foto: Valdivielso

¿Sería también un fracaso que el bloque de izquierdas no sumara catorce ediles?
No. Sumar catorce es un objetivo y un desafío. Nunca antes habíamos ganado unas elecciones y se hizo por primera vez hace cuatro años. Para poder gobernar tenemos que supera aquel resultado y creo que el PSOE lo va a mejorar. Sumaremos algún concejal más, queremos ser ambiciosos pero también realistas porque es muy difícil, hoy por hoy, sacar catorce ediles en esta ciudad. Confío en que con doce o trece se pueda gobernar.

Ha lanzado guiños a los empresarios, al centro... ¿El votante de Cs es el objetivo?
En parte sí. Tenemos muy claro que tenemos que consolidar el voto progresista. Que el voto útil en torno al PSOE conlleve, por supuesto, que la gran mayoría de los votos de centro-izquierda acaben aquí. Pero no solo eso porque con esos votos probablemente esté en tela de juicio la gobernabilidad. Tenemos que ser decididos y pedir el voto porque nos lo hemos ganado a pulso. Hemos demostrado que anteponemos la ciudad por encima de todo, que anteponemos el Ayuntamiento a nuestro partido y estamos legitimados a pedir cualquier voto centrado menos el radical de derechas. Hemos gobernado cuatro años con Cs, no hace falta buscar referencias políticas en otro lado.

Si logra retener la Alcaldía, ¿prefiere gobernar en solitario o en coalición con Podemos?
Completamente en solitario, sin ninguna duda. Es más, me comprometo, de entrada, a no tener que gobernar necesariamente en ninguna coalición. Voy a intentar evitar los gobiernos de coalición y tener un socio preferente para llegar a pactos puntuales. Mirando a la izquierda, en este caso a Podemos, si son los que muestran mayor complicidad a efectos de programa, pero también puedo mirar al centro porque ya lo hecho: en la oposición pactando con el PP y este mandato con Cs.

No soy sanchista, soy socialista, pero tengo una buena relación con el presidente»

Le molesta mucho que le comparen con Pedro Sánchez y eso del sanchismo burgalés. ¿Tanto cree que le puede perjudicar la comparación con las políticas del presidente del Gobierno?
No me molesta que me comparen con Sánchez. No soy sanchista, soy socialista, pero tengo una buena relación con el presidente y me parece injusto lo que están haciendo. No creo que el PP esté acertando con su campaña, que es la más sucia que ha visto la ciudad en los cuarenta años de democracia. Es un error manifiesto porque moviliza a nuestro electorado y, de alguna manera, genera un cierto rechazo entre el votante más centrado. Me molesta que me llamen putero cuando me comparan con Tito Berni, amigo de terroristas cuando me dicen que me vote Txapote o que vandalicen el mobiliario con pegatinas en las que dan la vuelta a nuestro símbolo. Tienen que estar muy desesperados y les va a pasar factura.

Quizá no ayuda que el domingo dijera Sánchez que va a poner todos los recursos para que Valladolid sea un referente industrial en Europa.
El presidente dice eso en todos los sitios.

Aquí en Burgos, en el Monasterio de San Juan, no lo dijo.
Dijo otras cosas. Es normal que Sánchez, Feijóo u otro líder nacional le regale los oídos al alcalde allí donde va. A nosotros nos dijo que éramos un referente en España a efectos de que somos la ciudad que tiene los servicios públicos más cerca. El presidente hace lo que puede en cada plaza para intentar reforzar a los candidatos. No tiene ninguna importancia.

En Podemos aseguran que el PSOE sin ellos no es un partido que vaya a querer poner en marcha políticas de izquierdas. ¿Qué tiene que decir a eso?
Me ha decepcionado muchísimo el discurso de Podemos en los últimos tres años de mandato. Al principio, cuando gobernábamos en solitario, fueron más responsables pero luego cambiaron radicalmente. ¿Cómo puede ser que nos traten como a su peor enemigo? ¿El realojo del poblado del Encuentro no es política de izquierdas? ¿Construir la nueva escuela infantil de Río Vena? ¿Regenerar el barrio de Gamonal en lugar de hacer todo donde siempre? ¿Incrementar el presupuesto en Cultura? ¿Hacer más accesible y sostenible la ciudad? ¿Apostar por el carril bici, por autobuses menos contaminantes o por las peatonalizaciones? ¿De qué está hablando? Es demagogia pura y dura.

Hace cuatro años defendía que era necesario actuar en la calle Vitoria para transformarla en una avenida comercial. Ahora también lo lleva en su programa. ¿Por qué ahora hay que creer que va a haber obras el próximo mandato?
Nunca ningún Gobierno municipal había invertido tanto en Gamonal. Más de diez millones de euros de inversión ejecutada, no licitada. Nos hemos gastado tres en Grandmontagne, Lavaderos y calle Roma, pero es que se ha creado un nuevo centro municipal, se ha remodelado el Mercado G-9, se ha puesto en valor el disuasorio de Las Torres. El Plan de Regeneración de Gamonal no ha hecho nada más que empezar. Espero tener aprobado antes de que finalice este mandato el proyecto técnico de la avenida comercial en la calle Vitoria y queremos mejorar la Barriada de la Inmaculada, el Pueblo Antiguo,  en tema de aparcamientos hacer el disuasorio del Silo, duplicar el subterráneo del parque Félix Rodríguez de la Fuente... Claro que queda mucho por hacer. Han sido muchos años de agravio pero nunca se ha hecho tanto en Gamonal como en este mandato

¿Es la idea que propusieron los vecinos y que obligó a rehacer el proyecto la mejor solución para la calle Vitoria?
Es una buena solución. No sé si es la mejor, pero es la que mayor consenso recibió de las dos rondas de contacto que hicimos con el consejo de barrio, con Zona G, asociaciones de vecinos y peñas.

En el Presupuesto de 2024 habrá dinero para transformar la calle Vitoria»

¿Veremos obras si repite como alcalde?
En cuanto gane lo primero que haré esa sacar a concurso la concesión demanial del Mercado Norte. Será lo primero que firmaré. Y lo segundo espero que sea iniciar el expediente para los pliegos de licitación de la calle Vitoria. Habrá presupuesto para los 7,5 millones de inversión el año que viene. 

En su programa garantizan que el próximo mandato se construirá el Mercado Norte, se intervendrá en la calle Vitoria, en la plaza España, se levantará el cívico de Fuentecillas, arreglarán la calle Madrid, dejarán listo el recinto ferial, levantarán las nuevas cocheras de autobuses, construirán un complejo deportivo en San Cristóbal... ¿No se han pasado de frenada?
No. Estos cuatro años, con una pandemia que trastocó la hoja de ruta durante dos años y con una guerra a las puertas de Europa, hemos sido el Ayuntamiento más inversor de la historia ejecutando 77,5 millones de euros. El PP en los cuatros anteriores ejecutó 72. Si hemos logrado hacer esto en unas circunstancias así, qué no haremos en un mandato normal.

Pero todo eso cuesta mucho y parece que se va a levantar la suspensión de las reglas fiscales.
Tenemos la suerte de que el Ayuntamiento va a cumplir este año con la regla de gasto ya que vamos a bajar del 110% de endeudamiento y vamos a acudir no sé si al 100% de los remanentes pero sí a buena parte. Incluso podemos acudir al endeudamiento, que hasta ahora no podíamos. 

¿Contempla pedir créditos?
Espero no tener que recurrir al endeudamiento, pero es un instrumento muy útil cuando, puntualmente, necesitas más recursos.

¿Qué espinita se la quedado clavada de este mandato?
La mayor es el centro cívico de Fuentecillas. No estoy nada satisfecho con la empresa que resultó adjudicataria de las obras ya que nos chantajeó y hemos tenido que empezar de cero. Lo lamento porque tenía que estar prácticamente hecho y no ha sido posible. Luego el polideportivo de San Pedro y San Felices. Nos pasó algo parecido aunque en este caso el error fue nuestro por aprobar un proyecto de una empresa de fuera que era un desastre. Y tercero Villatoro porque también el proyecto se hizo mal, con una mala medición de la malla y tuvimos que corregirlo. Como una cuestión menor, pero que me duele especialmente por ser de Gamonal, las goteras que quedan en la plaza Santiago.

Lo dice el PSOE, pero también el resto de formaciones. La organización interna del Ayuntamiento es una preocupación. ¿Cuál es su plan?
Comparto totalmente esa preocupación. Mi mayor quebradero de cabeza ha sido el ritmo interno. Para mí, el 60% de los disgustos que me he llevado han sido internos. Con servicios, discrepancias entre distintos técnicos... ¿Cómo lo vamos a abordar? La administración electrónica, aunque en estos últimos meses esta generando algún trastorno, necesariamente tiene que salir bien. Los responsables políticos vamos a poder fiscalizar los expedientes y poder controlar en qué punto se encuentra la tramitación, quién tiene que firmar los informes. No nos van a poder decir eso de que me acaba de llegar. Sabemos donde va a estar. Luego lo que queremos es introducir una novedad que se llama gestión por procesos. Es decir, dar la responsabilidad a un funcionario para que tenga capacidad, porque se las otorgamos dentro de las funciones adscritas al puesto de trabajo, de seguir y perseguir cada expediente. Esto no me lo invento yo, me lo ha trasladado Romo desde su experiencia en la gestión pública de hospitales. Confío mucho en su figura a efectos internos, de dar una vuelta a los procesos.

No podemos permitirnos el lujo de volver al pasado. Merecemos continuar»

En 2019 lo primero que hizo como alcalde fue visitar el poblado del Encuentro. ¿Tiene pensado lo que haría si vuelve a recibir el bastón de mando?
Quiero visitar la Barriada de la Inmaculada ya que va a ser la primera que va a entrar en el Plan de Vivienda y tiene que ser el siguiente ARU. Hay diez zonas identificadas de riesgo en la ciudad, pero la prioridad es esta.

¿Por qué tiene que ser usted el alcalde de Burgos?
Porque no podemos permitirnos el lujo de volver al pasado. Hace cuatro años que se produjo un hito sin precedentes que merece una oportunidad de continuidad. Hemos demostrado que el Ayuntamiento ha estado a la altura en los momentos más difíciles y los indicadores económicos hablan por sí solos. Esto no es casualidad. Las empresas, el comercio, los vecinos y los trabajadores han hecho un esfuerzo titánico pero también el Ayuntamiento ha estado acompañándoles. No nos podemos perder el futuro, un proyecto ilusionante como es de la candidatura a Capital Europea de la Cultura, que vamos a conseguir sí o sí, o apostar por la industria como nunca... Sí, un alcalde del PSOE ha puesto la industria en el eje, con más inversiones que nunca en materia de polígonos. He reivindicado un trato justo para nuestra ciudad a la Junta y al Gobierno de España y eso no lo han hecho otros alcaldes.