José María Vicente

El Rincón de...

José María Vicente


Bloques

04/07/2023

Desgraciadamente, estoy absolutamente convencido de que la tesis que pretendo desarrollar en las próximas líneas es completamente inviable en la situación política actual de España, a pesar de que también estoy seguro de que es compartida por la inmensa mayoría de españoles. Como todo el mundo sabe estamos a las puertas de unas elecciones generales, que determinarán el futuro de los próximos cuatro años de gobierno, cuyos resultados hoy son bastante inciertos en cuanto a la posibilidad de que se produzcan mayorías absolutas. Sin perjuicio de lo que pueda pasar en las próximas tres semanas, lo que parece claro es que el partido que va por delante en los sondeos, el Partido Popular, no va a conseguir ventaja suficiente para gobernar el solitario sin tener que apoyarse en los diputados de la extrema derecha, pagando el correspondiente peaje. Más agravada es la posición del Partido Socialista, que va por detrás en las encuestas, y para tener alguna opción de gobierno tendría que volver a construir una mayoría con los radicales de izquierda, independentistas extremos y moderados (si es que todavía existen), pagando una factura inaceptable para casi todos. Bueno pues ante estado de la cuestión me atrevo a decir que sería bueno para España y los españoles que ambos partidos mayoritarios se comprometieran a prestarse apoyo mutuo en el caso de necesitarlo para formar gobierno dejando fuera de juego todo aquello que está en los extremos cerca de los límites del sistema si es que algunos no están fuera claramente del juego democrático cuando hacen propuestas relacionadas con la integridad territorial de nuestro país. 

Sería un ejercicio de responsabilidad que tendría una grandísima acogida y nos afianzaría como sociedad evolucionada dando muestras de seriedad ante nuestros socios europeos y ante los grandes países con capacidad de influencia en el mundo. Pero como he dicho al principio, desgraciadamente no hay nada que hacer y volveremos a enredarnos en las acusaciones mutuas dando cancha a quienes propugnan la fractura social que supone una política de bloques que alientan la división entre nosotros. Y todavía tendremos que escuchar estos días apelaciones al sentido de responsabilidad en el ejercicio de nuestro derecho a votar.