Fernando González Urbaneja

Cartas desde 44 leguas

Fernando González Urbaneja


Votar en julio y repetir en diciembre

04/07/2023

A lo largo de once legislaturas (de 1977 a 2015, más de un tercio de siglo) la democracia española se comportó con estabilidad parlamentaria, un bipartidismo imperfecto (siempre con dos partidos a derecha e izquierda de los centrales y media docena de opciones nacionalistas) que hizo posibles una decena de gobiernos monocolores liderados por socialistas y populares casi a partes iguales. Ese esquema que algunos llaman 'régimen del 78' y otros 'democracia constitucional', entró en crisis a partir de 2014 como consecuencia de las frustraciones sociales tras la crisis con recesión de 2018.

Las elecciones generales de 2015 debilitaron el bipartidismo para complicar la formación de gobierno. Unas elecciones de las que no salió una mayoría de gobierno y que forzaron a nuevas elecciones al año siguiente (2016). El nuevo ejecutivo del PP, monocolor y débil, encabezado por Mariano Rajoy, cayó por una moción de censura que impuso un adelanto electoral en abril de 2019, unas elecciones que concluyeron con otro bloqueo en un Parlamento incapaz de lograr una mayoría de investidura. 

Tras seis meses de gobierno en funciones los electores volvieron a las urnas para configurar otra legislatura muy semejante a la anterior, con dos bloques enfrentados e incapaces de componer una mayoría estable de gobierno. La actual legislatura, concluida anticipadamente, conduce a unas elecciones a finales de julio, en plena canícula, que pueden repetir un mapa semejante al anterior, ahora con un PP ganador en votos y escaños, pero insuficiente para lograr la investidura. 

La hipótesis de una repetición electoral, como el año 2019, es probable; en base a las encuestas disponibles las posibilidades de ese escenario andan por el 30%, frente a un 40% de una mayoría PP/Vox y un 30% de que Pedro Sánchez repita la actual mayoría de amplio espectro con sesgo decidido a la confrontación y el 'bloquismo'. Un modelo muy distinto al del consenso bipartidista y constitucional del pasado. 
Los españoles han soportado la inestabilidad con 'indignación sosegada', y muestran voluntad de votar algo parecido a lo existente con entusiasmo muy limitado.