Los estudiantes no solo celebran el final de las clases, también el inicio del curso. Y en esas fiestas juegan un papel muy importante las novatadas, de ahí que en la Policía Local tengan en el calendario marcados en rojo los primeros días de septiembre. A lo largo de toda esta semana, las patrullas estarán muy pendientes de que no se produzcan grandes botellones y ritos iniciarios en el entorno de las facultades. Pero especialmente alerta estarán el jueves, que se presume como el día grande del pistoletazo de salida universitario. Habrá más presencia en las calles y también volarán los drones. 

Este año ha sido el Cuerpo Municipal el que ha dado un paso al frente en la vigilancia de las novatadas, pues no se ha celebrado, como en cursos anteriores, ninguna reunión con representantes de la Universidad de Burgos para establecer un dispositivo. Bien es cierto que desde la entidad educativa estarán muy pendientes de que en los recintos no se produce ningún tipo de rito iniciario, pues desde hace ya tiempo que están prohibidos. 

La Policía Local copiará los operativos de años previos a lo largo de estos días. Ya el fin de semana pasado se vieron por el centro de la ciudad alguna que otra novatada, si bien de momento no se han levantado actas de sanción por este motivo ni tampoco por botellones. Básicamente porque esta práctica en la ciudad durante el verano suele ser anecdótica, ya que los jóvenes suelen irse a los pueblos, donde prácticamente cada fin de semana hay verbenas y fiestas. 

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