El desarrollo de Miranda comporta consecuencias en la prestación de servicios municipales. Conjugar las necesidades con los recursos existentes supone un reto y en la Concejalía de Medio Ambiente indican que uno de los que ya está sobre la mesa es la ampliación de la red de autobuses urbanos a puntos de la ciudad como Los Corrales e Ircio. Alcaldía también está implicada en la mejora, que está justificada por la llegada de nuevos vecinos a las urbanizaciones del barrio y la implantación de empresas como Seur o Aldi en el polígono industrial.

«Se está estudiando y estamos viendo la viabilidad de esta intención, pero al final todo depende de la demanda que exista», reconocen en la Concejalía de Medioambiente, donde puntualizan que uno de los puntos a cuadrar pasa por la adaptación de estas futuras alternativas en el contrato que regula el transporte público en la ciudad, «porque no puedes cambiar ese documento sin contar con una base», matiza el edil responsable Unai Letona. 

En la empresa encargada del transporte urbano, su responsable, Jorge López, asume la intención y defiende que «nosotros estamos para dar un servicio a la ciudad». Esa postura no choca con la necesidad de revisar las condiciones si fraguan las novedades previstas, ya que «para cualquier modificación en el trazado de las líneas hay que ver las repercusiones económicas que tiene», asume. En este sentido, también habría que comprobar las condiciones de la flota actual, que resultaría insuficiente, «por lo que habría que ver la posibilidad de ampliarla en un autobús, para garantizar los servicios actuales y futuros», afirma López. 

Ese requisito ya lo conocen en el Consistorio, donde por ahora afrontan el escenario con margen de tiempo, «porque actualmente no existe la urgencia, pero sí que prevemos que será necesario, por lo que lo que estamos haciendo es adelantarnos a ese escenario», reconoce Letona, quien agrega que además de adaptar el aspecto económico al contrato, también tendrán que dictaminar que fórmula cuadra mejor para conjugar todos los intereses.

Por lo tanto, en los despachos municipales trabajan con la idea de ampliar la red de transporte urbano a corto plazo, por el crecimiento de las viviendas en el barrio de Los Corrales como primer argumento. Tras la pandemia, la demanda de viviendas unifamiliares creció mucho, «y además en muchos casos son parejas jóvenes», apunta el responsable municipal, que incluye dentro del estudio la premisa de «colocar por ejemplo rutas para los colegios», aunque el edil reitera que «todavía no se está planteando esa ampliación».

Unido a este crecimiento, podrían vincularse a la nueva línea de autobuses puntos que actualmente permanecen aislados de la red pública de transporte, como la urbanización de Fuentecaliente o la pedanía de Ircio. Ambas zonas formarían parte de esta ampliación, aunque en el Ayuntamiento añaden que la decisión no solo la justifican por los residentes, sino que añaden también a los trabajadores que tengan sus puestos laborales en el polígono ubicado en la entidad menor. 

En este sentido, las miradas las fijan en Ircio, donde en los últimos años ha aumentado el número de empresas activas. Además, Aldi estará plenamente operativa en 2024 y la estimación inicial hablaba de 200 nuevos empleos, que tendrían que sumarse a los existentes en Seur o la planta de Aciturri. Con todos estos ingredientes, Letona admite que la necesidad cada vez es mayor «y además el transporte urbano es una prioridad para nosotros», zanja el concejal.