Templos de compleja sencillez

M. URIZARNA / Tobes y Rahedo
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Las disparidades entre las iglesias y ermitas cautivaron a los visitantes que acudieron a la ruta por cinco municipios de la Bureba Románica, que abrieron sus puertas el domingo pasado

Arcos de medio punto y sencillez caracterizan este estilo. - Foto: Luis López Araico

Si hay un estilo arquitectónico que represente la Bureba es el románico. Cuando se inició la Reconquista en el siglo VIII, esta zona de la provincia, junto con las Merindades, fue de las primeras en expulsar a los musulmanes, al llegar las cruzadas cristianas desde el norte de la península. Y con ello, el románico, caracterizado por sus líneas sencillas, los iconos de sus pórticos y los arcos de medio punto, llegó para quedarse. En cada rincón aparece una iglesia o una ermita que evoca el esplendor que se vivió antaño. 

El domingo pasado fueron varios los que aprovechando la jornada de templos abiertos, se aventuraron a recorrer la comarca visitando cinco de los 21 monumentos que forman parte del proyecto Románico de la Bureba, que desarrolla Adeco Bureba. Begoña y Bruno comenzaron por la iglesia de San Andrés, en Soto de Bureba. El matrimonio, aunque ya jubilado, estudia Historia del Arte en la Unipec, únicamente por el placer de conocer la evolución de la sociedad a través de él, y qué mejor ocasión para hacerlo que esta. Tras reconocer las bóvedas de cañón y los arcos fajones en el interior del pueblo, la pareja continúo su ruta hacia la ermita de Nuestra Señora del Valle, ubicada en Monasterio de Rodilla.  

Unos realizaron el itinerario comenzando por el municipio más alejado de Burgos, Aguilar de Bureba, donde se encuentra Santa María la Mayor, y otros en sentido contrario. A escasos 20 kilómetros de la capital, la Iglesia de San Miguel Arcángel se levanta entre las casas de Tobes y Rahedo. En el exterior su fachada románica es innegable, pero su interior guarda un altar y dos retablos barrocos que componen un perfecto contraste. Estas antítesis son las que llevaron a José Ramón y a su cámara hasta allí, «Es impresionante, estamos ante unas piedras que tienen mil años de edad», comentó. El fotógrafo pasó la noche en su furgoneta, que tiene camperizada, en Frías, para comenzar desde Soto la ruta de la Bureba Románica. Y es que el otoño en las carreteras comarcales que unen los cinco municipios deja un paisaje de tonos amarillentos atractivo para recorrer. 

Más fotos:

En su blog, Sheila Lamas recopila construcciones de este estilo.
En su blog, Sheila Lamas recopila construcciones de este estilo. - Foto: Luis López Araico
José Ramón Ibáñez hizo fotos por afición.
José Ramón Ibáñez hizo fotos por afición. - Foto: Luis López Araico

Hasta Piérnigas llegaron Alberto y Ana para ver la ermita de San Martín, su favorita de las que visitaron ese día. «Es espartana y diferente», razonaron. Allí se encontraba también Sheila, que secundó el criterio de la pareja. Esta joven es toda una experta en el arte románico, y explicó que esta ermita es de las pocas que no tienen capiteles ni decoración escultórica, o que se compone de lajas de piedra en vez de tejas de barro, «es únicamente arquitectura», estilo que se llama aniconismo. Sheila lleva un blog vinculado a Twitter (@burebaromanica) e Instagram (@bureba_romanica), donde recopila construcciones románicas de Burgos y Palencia, y aprovechó el domingo para dar más visibilidad y difusión a estos monumentos, que a veces cuestan de apreciar por su sencillez, pero que constituyen un patrimonio muy numeroso y de importancia en la provincia burgalesa.