Pasan los años, se endurecen los controles e incluso se incrementan, pero el resultado sigue siendo preocupante. La Jefatura Provincial de Tráfico reconoce el elevado número de sanciones entre el transporte de mercancías por no respetar los descansos. No en vano, seis de cada diez conductores inspeccionados en las carreteras burgalesas es sancionado por exceder los tiempos de conducción e incluso manipular los sistemas de control, como los discos o los tacógrafos. De hecho, la mayoría de las multas que se tramitan son por este motivo. La Junta de Castilla y León, a través del Servicio Territorial de Movilidad y Transformación Digital, es la encargada de reforzar la vigilancia en colaboración con la Guardia Civil. 

En el último año, la inspección de transportes de Burgos realizó un total de 3.064 controles, tanto a vehículos que circulan por las carreteras de la provincia como empresas del sector. Como   consecuencia   de   estos   controles   se   formularon   un   total   de   2.043   denuncias. De ellas, 1.841 fueron por no respetar los tiempos de descanso. Más de un centenar de ellas fueron por manipular los sistemas de tacógrafo o discos. 

En número, se produjo un ligero descenso con respecto al Plan de Inspección de la Junta de Castilla y León llevado a cabo en 2021. Sin embargo, también se produjeron menos controles. Dicho de otro modo, en proporción, el porcentaje de vehículos controlados que terminan denunciados por exceder los tiempos de conducción fue exactamente el mismos. De hecho, permanece inalterable año tras año. 

Los datos no han pasado inadvertidos en la Jefatura Provincial de Tráfico, donde reconocen cierta preocupación por estas conductas. «Debería haber un cumplimiento escrupuloso de las reglas del juego, pero año tras año seguimos viendo que hay demasiadas personas que lo incumplen», señala el responsable de esta administración Raúl Galán. Tratar de corregir esta dinámica, añade, «es una de las prioridades desde la DGT». 

Galán concede que el sector del transporte, especialmente el de mercancías, «es un mundo complicado», donde hay una competencia brutal por los tiempos de entrega. Más aún en los últimos años con el 'boom' del comercio online. Sin embargo, cree que eso no debe ser la excusa para no ajustarse a unos tiempos marcados pensando en la seguridad vial. «Está demostrado que el exceso de conducción provoca distracciones y accidentes», puntualiza. De hecho, durante los peores meses de la pandemia, cuando no había un solo control en las carreteras, se produjeron muchos accidentes por salidas de vía que podrían vincularse a esta cuestión. 

Otra de las circunstancias que desde Tráfico hace años que se estudia es la posibilidad de introducir tacógrafos u otros sistemas de control en las furgonetas. Desde la DGT y la Guardia Civil han advertido que muchas empresas reparten cargas en vehículos de este tipo para que así los conductores no se vean obligados a respetar los mismos tiempos de descanso que los camiones. «Es un problema en alza y que en algún momento habrá que abordar seriamente. Estamos haciendo campañas específicas de control de este tipo de transporte, pero a lo mejor no es suficiente y hay que introducir los aparatos de vigilancia», concluye Raúl Galán.