El anticipo de las elecciones generales pilló por «sorpresa» a los dirigentes de los diferentes partidos políticos en Burgos, si bien tanto los presidentes del PP, Borja Suárez, como de Vox, Iñaki Sicilia, fueron menos generosos que los socialistas en la interpretación de un anuncio que desde las fuerzas conservadoras ven como un movimiento «táctico», medido y para nada improvisado por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Suárez considera que el presidente del Gobierno ha anticipado los comicios nacionales por «puro tacticismo, para minimizar daños», en la creencia de que «en julio va a sacar un mejor resultado que en diciembre». Sin embargo, el político popular cree que el resultado de las municipales ha levantado una «ola» en toda España que va a «arrastrar» a Sánchez, «con lo que el adelanto resulta irrelevante».
Detalla el líder popular que ahora los partidos tienen la maquinaria engrasada para afrontar otras elecciones y advierte de que se trata «de una oportunidad perfecta para que haya un cambio rotundo en España» y que Alberto Núñez Feijóo pueda ocupar la Moncloa este mismo verano. También admite que el anuncio de Sánchez le ha causado sorpresa y ha pillado «con el pie cambiado» al PP, que había convocado varias reuniones a todos los niveles para analizar los resultados de los municipales y ahora tendrá que analizar también esa próxima cita electoral nacional.
Sobre si habrá cambios en las candidaturas que el partido tendrá que elaborar a la mayor brevedad, indica que es «pronto». Sicilia, en la misma línea, afirma que no es algo en lo que ahora estén pensando y se ciñe a la «gran motivación» que ahora tienen en el partido tras los últimos resultados «para echar a Sánchez».
La secretaria provincial del PSOE, Esther Peña, confesaba ayer sentirse «sorprendida» por el anuncio de Pedro Sánchez de adelantar las elecciones al 23 de julio. No obstante, considera que ha «asumido su responsabilidad» en la debacle del PSOE en los comicios municipales del domingo. «Ha sido lo más ético y gesto al que, tristemente, no estamos acostumbrados en este país», señaló la también diputada socialista.
Peña, quien reconoce que no se esperaba los malos resultados de su partido a nivel nacional, sí que saca pecho con «lo conseguido en la capital burgalesa, lo que significa que en Burgos se están haciendo las cosas bastante bien».
En todo caso, aseguró que el PSOE de Burgos está «preparado» para encarar otro proceso electoral, «ahora que la maquinaria está bien engrasada». Además, tendrá que tener las listas al Congreso y al Senado preparadas en tiempo récord puesto que la fecha límite para presentarlas es el 14 de junio. Ya avanza que «no va a haber muchos cambios» en las candidaturas «porque el equipo funciona.
El aún alcalde y candidato a la reelección, Daniel de la Rosa, detalló que antes de conocerse esta decisión había tenido oportunidad de hablar con la Ejecutiva Federal de su partido, a la que le trasladó que en su opinión se hacía necesaria una «ruptura» del acuerdo con Unidas Podemos a nivel nacional. Algo que había quedado evidenciado en que la formación morada había sido la que había «lastrado» los resultados en las elecciones municipales.
Al mismo tiempo que pedía a Sánchez que «se aleje de Podemos, Bildu o ERC», De la Rosa sí defendió que «ha puesto en un brete al PP justo cuando debe pactar con Vox los ayuntamientos y las comunidades autónomas».
La senadora y candidata a la Alcaldía de Burgos por el PP, Cristina Ayala, habló también de «sorpresa» por la convocatoria electoral y criticó que Sánchez no hiciera coincidir esta cita con los comicios municipales por el «derroche» económico para el país. Coincide con el presidente del PP de Burgos en que la razón del anticipo electoral es táctica.